GUADALAJARA, JALISCO (27/AGO/2016).- Ante las modificaciones de los estilos de vida, alimentación y falta de actividad física, se ha incrementado la incidencia de casos de diabetes tipo dos en niños y niñas, aseguró la especialista Carolina Torres Anguiano. La profesora del Departamento de Endocrinología de la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG), resaltó que esta alta incidencia de menores con problemas de diabetes se debe en gran medida a que cada vez más pequeños sufren de sobrepeso y obesidad. "En las consultas médicas de los centros de salud cada vez es más frecuente descubrir que los niños sufren de sobrepeso, obesidad y diabetes tipo dos", insistió Torres Anguiano. Refirió que en México se calcula, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición, que más del 9.2 por ciento de la población sufre diabetes. Torres Anguiano detalló que los padecimientos de diabetes tipo dos en niños pueden pasar desapercibidos ya que es una enfermedad silenciosa; las personas no se dan cuenta de esta enfermedad hasta que sufren sus síntomas. Destacó que para prevenir la enfermedad se debe tener una vigilancia adecuada del peso y la alimentación de los niños y si éstos sufren de sobrepeso, realizar estudios. Además se deben cambiar los hábitos de alimentación. "Es común que los niños pasen su tiempo frente a aparatos electrónicos y computadoras; pasan mucho tiempo inactivos lo que favorece el aumento de peso. Recomiendo limitar el uso de aparatos electrónicos solamente dos horas al día. "Se ha descubierto que el hecho de comer viendo la televisión aumenta la ingesta calórica. Hay que favorecer la activación física en los niños, disminuir el consumo de bebidas azucaradas para evitar estos males que cuestan, a la larga, muchos recursos económicos a la familia", dijo. Uno de los síntomas más comunes que se debe tener en cuenta es la acantosis nigricans, una coloración oscura en la parte posterior del cuello, y alrededor de este, con piel engrosada e hiperpigmentación que se presenta cuando el niño tiene sobrepeso. La profesora pidió que, de aparecer este tipo de pigmentación en la piel, los padres acudan a un endocrinólogo para buscar alteraciones metabólicas.
