Doble confrontación entre equipos tapatíos contra regiomontanos presenta dentro de su cartelera la Jornada 3 del Apertura 2015 de la Liga MX.Esta noche en el Estadio Jalisco los Rojinegros del Atlas se presentan ante su afición, que ahora sí podrá ingresar a las tribunas del inmueble de la Calzada Independencia, ya que en la fecha inaugural esto no fue posible por el veto que impuso la Comisión Disciplinaria tras los desmanes acontecidos en el Clásico Tapatío disputado en la Liguilla pasada.Ahora sí los seguidores de los Zorros podrán atestiguar las acciones de los dos equipos, que por cierto son dirigidos por los dos últimos entrenadores del América: Antonio Mohamed yGustavo Matosas.En el caso del uruguayo, su contratación fue muy bien recibida por la parcialidad atlista, que espera llegar mucho más lejos de lo que lo hiciera la escuadra dirigida por Tomás Boy.Para el cotejo de hoy, los atlistas llegan habiendo alternado una de arena y una de cal: derrota frente a Querétaro y triunfo sobre el América en el Azteca.De tal manera que los de Matosas no tienen más opción que a partir de esta noche alimentar jornada tras jornada la ilusión de sus seguidores de que están para cosas importantes, y para tal efecto quizá el simplemente ganar no baste en el exigente ánimo de los rojinegros, que siempre pretende que su equipo juegue bien y sea convincente en sus actuaciones. Lo anterior le pasó una costosa factura a Tomás Boy.El rival de los tapatíos, Monterrey, ya fue diseñado para este torneo en conformidad las pretensiones de Antonio Mohamed, pues en el torneo anterior “el Turco” llegó al relevo de Carlos Barra cuando el campeonato ya estaba en marcha.Si el entrenador argentino logra hacer funcionar a su equipo puede andar bien, pues sumó a sus filas a gente capaz como el uruguayo Walter Garagano, Rogelio Funes Mori y el regreso del Aldo de Nigris.Los Rayados se obsequiaron y le obsequiaron al futbol mexicano un estadio espectacular, de primer nivel, que está a la altura de los mejores del mundo. Dada la importancia de la capital del Estado de Nuevo León, requería de un recinto como el que se inauguró el domingo pasado. Resultaba inverosímil que la auto nombrada “mejor afición” (lo cual puede ser debatible) tuviera como sedes de sus equipos estadios obsoletos y avejentados.La nueva Casa Rayada forma parte de la nueva generación de estadios en México que se adecuan a las normas vigentes en cuanto a los nuevos conceptos en la construcción de Estadios. Algunos ejemplos como el Omnilife, el TSM, el Hidalgo o el Victoria de Aguascalientes o el de Xolos, por citar algunos.La comodidad, el confort, ciertos lujos en los nuevos recintos futboleros han desplazado a los estadios de capacidades inmensas que resultan obsoletos, algunos de ellos como Maracaná, Wembley o el Azteca se han modificado, por comodidad y modernidad.Tristemente el querido Estadio Jalisco, con su gran historia y con un sabor futbolero como pocos, ha quedado abandonado a su suerte y lejos de la modernización. No ha sido posible embutacarlo como lo exige la Femexfut, de pantallas gigantes ni hablar, no se ha tenido la capacidad para encontrar una alternativa viable y sustentable pues de sus inquilinos solo el Atlas trata de hacer algo, a los demás les vale.Ahí está, como testigo mudo de la realidad del Jalisco, el elevador que se quedó a medio construir desde años y que nadie se ha propuesto terminar.
