GUADALAJARA, JALISCO (24/AGO/2016).- Como parte del proyecto de renovación urbana en Santa Tere, el Ayuntamiento de Guadalajara comenzó con la tercera etapa de obras en algunas de sus calles. Los primeros trabajos se realizan desde hace tres semanas en las calles de Pedro Buzeta y Ramos Millán, desde Juan Álvarez hasta Herrera y Cairo, donde las calles están completamente cerradas, sólo con paso en los cruces.Sin embargo, la obra completa abarca una especie de “herradura” por la calle Pedro Buzeta, hasta Hospital, baja hacia Ramos Millán, hasta llegar nuevamente a Herrera y Cairo, para lograr una intervención de 11 cuadras.Las obras consisten en cambio de líneas hidrosanitarias, tomas domiciliarias y drenaje, cambio de base, colocación de losa de concreto estampado y homologación de banquetas con las otras ya intervenidas, informó el director de Obras Públicas de Guadalajara, Jorge Gastón González Alcerreca.También se contempla hacer subterráneas las líneas de teléfono, de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y de empresas de cable, así como cambio de luminarias por unas tipo LED.Con costo de 11.5 millones de pesos, vía Consejo Metropolitano del 2015, se tiene contemplada una duración de 120 días, esperan terminar en diciembre.La idea inicial era intervenir la “herradura” completa, pero la Secretaría de Movilidad pidió que fueran paulatinamente.El avance de trabajos hasta el momento es de alrededor de 15% y el compromiso es que la obra termine en tiempo y forma, como ocurrió con la segunda etapa, donde se invirtieron siete millones de pesos.LOCATARIOS ASEGURAN QUE LAS VENTAS HAN BAJADOComercios piden puntualidad en conclusión de trabajosCon el inicio de las obras en Santa Tere, comerciantes y vecinos piden que el Ayuntamiento de Guadalajara cumpla con los 120 días de plazo para terminar, pues desde que iniciaron con la intervención las ventas han ido a la baja.En un recorrido realizado el lunes por Pedro Buzeta y Ramos Millán, las calles se encontraban cerradas por el cambio de tomas hidrosanitarias, domiciliarias y de drenaje.En Pedro Buzeta apenas se encontraban algunos trabajadores con movimiento manual de tierras, quienes comenzaron a hacer actividades cuando vieron presencia de este medio.Mientras, en Ramos Millán, las calles abiertas y enlodadas lucieron ausentes de trabajadores, situación confirmada por dueños y encargados de comercios de la calle, quienes denunciaron que han pasado días sin movimiento alguno.Una de las comerciantes, Evelyn Macías, comentó que sus ventas han bajado hasta la mitad, por lo que pide al Ayuntamiento cumpla y entregue las calles en la fecha que acordaron.
