'Aquí los tratan como niños, no como a los delincuentes'

GUADALAJARA, JALISCO (01/FEB/2016).- Abraham no entendía ni quería obedecer a sus padres. Salía a la calle con sus amigos para regresar alterado por el consumo de la mariguana y metanfetaminas, además de inhalantes: “Gastaba un montón de dinero, ni me fijaba cuánto. Como 200 pesos diarios”.

Ahora tiene 16 años, pero cuando iba a la secundaria no hacía nada y por ello fue expulsado. Permaneció un año ocioso hasta que sus padres lo inscribieron en otra secundaria, de la cual lo expulsaron nuevamente porque llevó su adicción hasta las aulas.

“Pero me di cuenta que todo ese tiempo lo había perdido. Me di cuenta que hacía las cosas mal, y preferí buscar otra forma de vida mejor”.

Así ingresó al Centro de Rehabilitación Juventud sin Acciones, donde después de cinco meses de resistencia empezó a cambiar: “Estaba viendo cómo irme de aquí y buscándome problemas. Pero agarré la onda de que estaba mal. Ya llevo 11 meses y sé que puedo rehabilitarme”.

El futuro en que se visualiza Abraham es dedicándose a la ingeniería civil. Lo que tiene seguro es que su padre Gabriel lo apoyará siempre.

“Ha sido algo complicado económicamente y moralmente que te enteres que tu hijo tiene problemas cuando uno tenía un proyecto de vida y se te sale de las manos”, dice su padre, que ahora celebra haber encontrado un centro de rehabilitación en la Colonia El Vergel de Tlaquepaque.

Recuerda que Abraham “no hablaba” antes de entrar al centro, no pedía permiso a sus padres para hacer cualquier cosa. Gabriel reconoce que los problemas que tuvo con su pareja provocaron que su hijo empezara a consumir drogas, “pero ahora ya está cambiado, estoy sorprendido”.

A poco tiempo de que su hijo se rehabilite por completo le recomienda mirar hacia adelante y no vivir con “el error del pasado. Lo quiero ver que triunfe”.

Mientras que Yahir, otro niño en rehabilitación, recuerda que fue inducido en las drogas por sus amigos que le ofrecieron cigarros y después marihuana hasta llegar a las pastillas, “pero cuando me vieron en mi casa que cada vez llegaba más loco, tenían miedo de encerrarme, hasta que encontraron este centro”.

Agradece que en Juventud sin Adicciones se haya enseñado a tener “los pantalones” suficientes para negarse a consumir más estupefacientes.

Su madre Elizabeth no puede estar más contenta con los resultados que ha tenido: “Nos hacen trabajar en conjunto, vemos los errores que cometimos y no los volvemos a cometer. Nos enseñan a convivir con tus hijos y expresar lo que sienten y respetar sus decisiones”.

Reconoce que la falta de atención y comunicación lo motivó a su consumo de drogas, pero afirma que ha valido la pena internarlo para su rehabilitación, “aquí los tratan como niños y no como delincuentes… y eso hace que cambien su forma y su actitud”.

Baja “percepción” de riesgo

En el nivel de bachillerato, el 16.5% de los estudiantes de Guadalajara considera que no es peligroso el consumo de mariguana. Este es el porcentaje más alto de las nueve ciudades que se tomaron como muestra en la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas en Estudiantes (Encode) 2014, del Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente Muñiz y la Comisión Nacional Contra las Adicciones. A nivel secundaria también destaca Guadalajara porque el 8.1% de los estudiantes de ese nivel considera que no es peligroso el consumo de esta droga, y también es la mayor cantidad de todas las ciudades.

Gustavo Iglesias Robles, secretario técnico del Consejo Estatal Contra las Adicciones en Jalisco (CECAJ), explica que cuando la percepción del riesgo disminuye la oferta aumenta. Contextualiza que, por ejemplo, las campañas informativas sobre el daño del cigarro han fructificado hasta el punto de que los jóvenes ya no fuman tan a menudo; sin embargo, ha sucedido lo contrario con la marihuana derivado de la “propaganda directa o indirecta que se ha hecho. Por ello ha disminuido la percepción del riesgo, (los jóvenes) no le ven tanto problema a fumar”.

Aclara que no es un fenómeno que se especifica en México, ya que se ha derivado de la difusión de las noticias desde otros países que han validado su uso medicinal o recreativo: “Es una propaganda indirecta”.

A nivel nacional también se da esta tendencia, ya que la percepción de riesgo de consumir marihuana es baja en contraste con la cocaína, los inhalables y la heroína. Las estadísticas indican que el 69% de los estudiantes consideraron que la marihuana era peligrosa, pero en las otras sustancias aumenta hasta el 80% o más.

Iglesias Robles comenta que los efectos inmediatos al consumir la yerba son sensaciones de “hormigueo” en el cuerpo y tranquilidad, “pero es una de las cosas que crea la tolerancia pronto, por lo cual se requieren después cantidades más grandes”.

Contextualiza que el consumo provoca daños irreversibles en el sistema nervioso central: “Hay datos que indican que estas personas, entre más jóvenes la consuman, registran un retraso en el grado de maduración. Además el 80% de los jóvenes que usan marihuana llegarán a otra droga; la mariguana sigue siendo la puerta de entrada para drogas más fuertes. No los lleva a su adicción, sino el resultado será de una segunda o tercera droga que los llevará a un centro de rehabilitación”.

SABER MÁS

El sondeo

Para el estudio, las escuelas se seleccionaron aleatoriamente al interior de cada una de las 32 entidades y de las nueve ciudades de cada nivel educativo. Esto da una estimación de casi seis mil 358 grupos escolares o 191 mil 880 estudiantes encuestados.

MENORES DE EDAD DEJAN LA ADICCIÓN PARA CAMBIAR DE VIDA

En bachillerato se multiplica el consumo

Los resultados la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas en Estudiantes revelan que la mariguana es la droga de principal consumo en jóvenes de Guadalajara, tanto en secundaria como en bachillerato, pero especialmente en este último nivel se duplica: de 9.7% hasta 19.3%. En las tendencias internacionales se observa que el consumo entre esta población es menor en comparación con Estados Unidos, Canadá, Belice, Costa Rica, Argentina, Chile y Uruguay, pero mayor que otros países como Honduras, El Salvador, Panamá o Brasil.

Jalisco es protagonista junto con el Estado de México, Quintana Roo y Chihuahua, ya que tienen la problemática más alta de consumo de sustancias en estudiantes de secundaria y bachillerato. Particularmente los estudiantes de secundaria en Guadalajara superan el consumo de cualquier droga y específicamente de marihuana. Sólo son superados por la Ciudad de México.

Gustavo Iglesias Robles, secretario técnico del Consejo Estatal Contra las Adicciones (CECAJ), describe que uno de los factores que hace propensos a consumir drogas es un ambiente agresivo hacia la salud mental de los jóvenes.

Con el fin de prevenir estos casos, a pesar de la dificultad que significa cubrir y prevenir el consumo de drogas en alrededor de dos millones de adolescentes en el Estado, el CECAJ conformó una red de 42 universidades y de 112 comisiones municipales, varios de los DIF Municipales, que realizan campañas contra las adicciones.

Estados donde más estudiantes de secundaria han consumido mariguana (porcentaje)

Ciudad de México	10.5
Jalisco	9.4
Estado de México	7.4
Quintana Roo	7
Guanajuato	6.9
Colima	6.7
Guerrero	6.7
Michoacán	6.7
Morelos	6.7
Nayarit	6.4

Fuente: Encuesta Nacional de Consumo de Drogas en Estudiantes.

Estados donde más estudiantes de bachillerato han consumido mariguana (porcentaje)

Ciudad de México	27.1
Quintana Roo	25.5
Estado de México	24
Querétaro	23.4
Morelos	22.4
Guanajuato	22.1
Chihuahua	21.2
Hidalgo	18.5
Jalisco	17.5
San Luis Potosí	17.2

Fuente: Encuesta Nacional de Consumo de Drogas en Estudiantes.

Amigos, los que más influyen

Las personas que usan drogas más cercanas a los nuevos consumidores son los mejores amigos. El 18.2% de los estudiantes que utilizaron estupefacientes dicen que los consumidores más cercanos a ellos son sus amigos, en contraste con 5.9% de los hermanos y 4.6% de los papás.

Gustavo Iglesias Robles comenta al respecto que los actores mencionados deberían fungir como pilares para la formación de los niños. El primero son los padres, quienes deben participar en una campaña fuerte de autoestima para sus hijos y enseñarlos “a decir no”; después es la familia completa que debe tener estructuras fuertes que aporten a la salud mental de todos. Una más es la escuela, donde los maestros deben trabajar en la creación de redes contra las adicciones. Y el cuarto sitio es la comunidad: “Pero los amigos son los que primeramente facilitan ese tipo de sustancias a las personas”.

SABER MÁS

Personas cercanas al adolescente que ha consumido drogas (porcentaje)     

Cercanía	Hombres	Mujeres
Mejor amigo	18.8	17.6
Hermanos/as	5.4	6.4
Papá	4.6	4.5
Mamá	1	0.9

Fuente: Encuesta Nacional de Consumo de Drogas en Estudiantes.

TESTIMONIO

El proyecto que nació en Polanco

Más de una década ha dedicado Irma Santander López a la atención y rehabilitación de personas adictas. Jamás pensó que salir con una bocina a las calles de la Colonia Polanco, donde inició su travesía, terminaría con la apertura del Centro de Rehabilitación Juventud sin Adicciones con sede en la colonia El Vergel, de Tlaquepaque.

La fundadora de esta asociación estaba azorada por la cantidad de pandillas que existían en Polanco, donde tenía un negocio de venta de ropa de “segunda mano”. El mismo local que fue “atacado” por un joven drogado, que hizo destrozos cuando estaba bajo el influjo de estas sustancias. Pero la culpa lo trastornó aún más y regresó, pero para pedir perdón a Irma y ofrecerle cualquier manera de subsanar su falta y pedirle ayuda para dejar el enorme fantasma de las drogas que lo seguía siempre.

Irma lo llevó con un psicólogo para que empezara a cambiar de hábitos hasta que se le ocurrió pedir ayuda al párroco de la colonia con quien comenzó a organizar “tardeadas” y quermeses donde aprovechaba para platicar con las pandillas. Poco a poco vio los resultados en el comportamiento de las personas consumidoras de drogas.

El gusto que le encontró a la actividad la llevó a presentarse en la oficina del entonces rector de la Universidad Autónoma de Guadalajara para pedir que la dejará entrar al Diplomado en Atención a la Vida Emocional para la Prevención de Adicciones, ya que no tenía dinero para pagar los 48 mil pesos que costaba al semestre. Pasó semanas en vilo hasta que el directivo la recibió: “Me preguntó: ‘Por qué hacía todo esto’. Y le platiqué que me nacía del corazón hacerlo y porque le daba sentido a mi vida. Sirviendo a los demás siento que tiene sentido mi vida. No gano de esto, hasta pongo de mi bolsa”.

Un viernes sonó el teléfono y la dejaron entrar de oyente. Después empezó a impartir conferencias, lo que le sirvió para contactar a una persona que le ofreció una casa para abrir el primer centro de rehabilitación, y aunque después tuvo que entregarla, gracias a esa red de niños atendidos obtuvo una nueva vivienda en la Colonia El Vergel: “Me faltan muchos recursos, tengo 21 personas en nómina. Nos sostenemos de donativos en especie. Hubo un mes que nos cortaron la luz, pero yo hago algo bueno por la sociedad, es un problema de salud que nos atañe a todos”.

Ahora atiende a 50 menores de edad, a quienes les quitó la etiqueta de vagos.

Ocho de cada 10 en rehabilitación tienen menos de 21 años

Gustavo Iglesias Robles, secretario técnico del Consejo Estatal Contra las Adicciones en Jalisco (CECAJ), destaca que el 80% de las personas en rehabilitación son menores de 21 años: “Hay evidencias importantes de que una persona, entre más joven use la mariguana, más daño tiene a su salud”.

Por ello, dentro de la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas en Estudiantes (Encode), se expone que existe responsabilidad en estos casos de todos los actores para la generación de las condiciones para que los jóvenes alcancen salud y bienestar. Añade que las tareas preventivas deben fortalecerse con los 340 Centros de Atención Primaria a las Adicciones, 20 de éstos en Jalisco.

La Encode señala que las drogas ilegales están cada vez más al alcance de los menores y esto se originó del cambio en las rutas de tránsito de la droga que provenía desde Sudamérica y pasaba por el Caribe; sin embargo, la nueva ruta fue México. Entre las drogas que se involucraron en este fenómeno está la cocaína, la heroína, el crack y las metanfetaminas.

La Encuesta Nacional de Adicciones ya había notificado desde 2011 la prevalencia en el uso de cualquier droga ilegal en la población con edades entre los 12 y 17 años, entre los cuales aumentó significativamente, pasando de 1.3% a 2.9% entre los años 2002 y 2011; la mariguana fue la protagonista como la droga más consumida.

Dentro del estudio financiado por la Secretaría de Salud Federal, se menciona que en 20 entidades del país el consumo de mariguana entre pacientes que solicitan tratamiento en las unidades de atención institucional ya superó al de tabaco, como Jalisco; y en 18 entidades, ya superó al consumo de alcohol.

A nivel nacional, las estadísticas de los Centros de Integración Juvenil reportan que la mayor parte de las personas que solicitan ayuda en estos espacios (45.4%) se debe al consumo de mariguana, “es decir, es la droga de impacto”, informa Iglesias Robles.

En los últimos meses, desde el CECAJ se han realizado 60 mil entrevistas o encuestas a ciudadanos de todo el Estado y registraron que 10 mil de ellos están expuestos a consumir drogas “porque hay alguien o están en algún contexto donde tuvieron contacto con droga”.

Otra de las acciones que realiza es capacitar y profesionalizar a los encargados y empleados de los centros de rehabilitación para que incrementen su calidad de modelo terapéutico.

Desde el mismo organismo existen 20 Centros de Atención Primaria que otorgan asesorías breves con los niños y se les otorga capacitación para salir del problema de adicciones.

LA VOZ DEL EXPERTO

Abandono incita a consumir drogas

Paola Lazo Corvera (integrante del Centro de Justicia para Paz y el Desarrollo).

El acceso a los estupefacientes, gracias al crecimiento del narcomenudeo, ha provocado que en zonas vulnerables económicamente aumentara el consumo de estas sustancias, sobre todo por parte de menores de edad. El factor clave es que coincide con que las autoridades no han logrado insertar a los jóvenes en otras actividades que sean de su interés. Están en abandono y no hay atractivos para ellos.

A esto se añade que no se les ha infundido un sentido de pertenencia a la comunidad y no son reconocidas socialmente sus habilidades para colaborar con la misma.

Se ha estigmatizado tanto a los jóvenes que, en lugar de atenderlos de manera más amplia y acercarse a ellos para demostrarles que son capaces de tomar buenas decisiones, se les sanciona y recrimina por todo. Los adultos no hemos sabido acercarnos a los jóvenes para formar diálogos y poder debatir juntos qué es lo que más les conviene.

Sobre las consecuencias para la salud que trae consumir drogas, especialmente mariguana, hace falta información acertada. Observa que esto, precisamente, haría más acertadas las decisiones que tomen los jóvenes.

Esta cultura de información debería extenderse a otros rubros como la sexualidad, que involucraría un diálogo más cercano con la familia.

TELÓN DE FONDO

Discuten uso medicinal o recreativo

Este mes, la Secretaría de Gobernación (Segob) abrió la discusión con el primero de cinco foros donde se abordará el tema del uso de la mariguana. El primer encuentro abordó la temática de “salud pública y prevención”. Este foro irá acompañado por otras discusiones entre representantes de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, y de académicos de universidades como Harvard o la UNAM. Los cuatro foros que faltan tratarán los temas de ética y derechos humanos, aspectos económicos y de regulación, seguridad ciudadana (a realizarse en Guadalajara) y otro de conclusiones.

La instrucción fue dada por el mismo Presidente Enrique Peña Nieto, quien dijo: “Para mí no sería deseable ni estoy en favor de una eventual legalización en el consumo de la mariguana”.

La presión para organizar estos foros tuvo un punto de inflexión cuando la Suprema Corte concedió un amparo a la Sociedad Mexicana de Autoconsumo Responsable y Tolerante, la cual solicitó un permiso para que sus miembros cultiven y consuman su propia mariguana. En noviembre de 2015, la SCJN declaró inconstitucionales cinco artículos de la Ley General de Salud que prohíben a la Secretaría de Salud autorizar actos relacionados con el uso personal de mariguana con fines recreativos.

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