Locatarios cazan a Ramiro tras temblor

GUADALAJARA, JALISCO (08/MAY/2014).- Las puertas de las oficinas en el Palacio Municipal estaban cerrradas y resguardadas por policías.

El ambiente era hermético, hasta que un grupo de alrededor de 20 comerciantes ingresaron al patio del lugar. Eran los vendedores del andador Pedro Loza que acudieron a buscar una explicación del alcalde, Ramiro Hernández, sobre la reubicación a esa zona de los locatarios del Mercado Corona.

Subían y bajaban por el Ayuntamiento para tratar de encontrar al Alcalde quien no les había consultado la decisión que tomó el miércoles por la noche junto con afectados del Mercado Corona. Pero no parecía haber ningún resultado; faltaban minutos para validar el decreto de reubicación en la sesión de cabildo, pero la naturaleza conspiró contra a favor de los locatarios inconformes.

La tierra se empezó a mover: un temblor. Las alarmas del edificio sonaron y ocasionarios que las puertas de las oficinas se abrieran. La marcha de la evacuación llevó a los trabajadores del Ayuntamiento, a los comerciantes del andador Pedro Loza, a los medios de comunicación y , finalmente, al alcalde Ramiro Hernández, a salir por la puerta principal.

El primer edil estaba asediado por los reporteros y un montón de cámaras a su alrededor. La confusión reinó a las puertas del Palacio, tal y como sucedió antes desde el incendio del domingo en el Mercado Corona.

El tropel evacuado caminó a la Rotonda de los Hombres Ilustres para tener una mejor seguridad. Fue el lugar donde, por fin, dio la cara a los locatarios de Pedro Loza. Le cuestionaron la decisión que le costó más de seis horas tomar: instalar en el andador a más comerciantes.

La presión detonó un nuevo viraje en el conflicto: nada se aprobaría en cabildo hasta negociar con los vendedores inconformes.