Trailero agradece a trabajadores que lo salvaron

GUADALAJARA, JALISCO (03/SEP/2013).- Aún aturdido y convaleciente, Arturo Bravo Mendoza se despertó la mañana de este martes en una camilla de Urgencias en el Hospital Regional 180 del IMSS, en Tlajomulco de Zúñiga, a donde fue llevado tras el accidente que sufrió la tarde del lunes sobre la carretera a Chapala.
 
El trailero, a quien apodan el "Chicles", se iba a convertir en una nota roja más para el morbo colectivo: "Chofer muere quemado dentro de la cabina de su tráiler", diría más de un titular. Pero no en esta ocasión, pues fue rescatado a tiempo por unos trabajadores que para su fortuna se encontraban frente al lugar del accidente en ese momento. Y coincidentemente, el negocio llevaba su apellido: "Materiales Bravo"
 
Hacia las 10:30 horas de este martes se permitía a los visitantes ingresar al hospital. Arturo, que era cuidado por su madre, María Elena, seguía dormido, con suero y con el brazo derecho vendado:
 
--¿Sigues dormido o estás despierto? --preguntó su hermana, Evelia.
 
--¡Aaaaayyy! --respondió Arturo.
 
--Hoy es cuando vas a sentir los dolores, hermano.
 
El joven de 27 años se despabiló y comenzó a dolerse de su mano y antebrazo quemados cuando estaba inconsciente. Contó qué fue lo que pasó a las 17:15 horas del lunes, en el kilómetro 25 de la carretera a Chapala, cuando conducía un tráiler cargado de grava, con rumbo hacia el Aeropuerto: "Nomás me acuerdo que se me atravesó un carro a lo loco, yo iba como a 90 (kilómetros por hora) y para no golpearlo me saqué, pero con el peso que traía se me destanteó, no se puede frenar tan fácil".
 
Después, sólo recordó que cuando estaba en el suelo, alguien lo había sacado del camión que se incendiaba después de chocar con un par de árboles: "Me preguntaban que si sabía dónde estaba, que si tenía familia. Los veía y no entendía qué me había pasado".
 
Cuando llegó el personal de la Cruz Verde de El Salto, le explicaron a grandes rasgos: "'Te estabas quemando, te tuvieron que sacar', y yo me voltee a ver la mano, '¿Pus qué chin... traigo?'". Tenía quemaduras de segundo grado y golpes en el tórax y cráneo.
 
Fue trasladado directo al Hospital Regional 180; hasta la mañana del martes no sabía quién lo había sacado del tráiler. Se enteró que fue Daniel Elías Barón el que lo sacó, y que éste, Rubén Hernández, y el "Burras" apagaron el fuego con una pipa que tenían, por suerte, llena de agua.
 
En el negocio de materiales, los empleados recordaron la proeza de Daniel, quien fue el primero en ver el camión en llamas y reaccionó de inmediato, sin tomar precaución por los autos que circulaban por la carretera: "Sí, se pasó como los burros", dijo el "Burras". Tras él corrió Rubén, quien recordó que al abrir la puerta del tráiler, Daniel se le perdió entre el humo. Pero a tientas, logró sacar como muñeco de trapo a Arturo, quien voló por el aire del jalón que le dio Daniel, pues no midió su fuerza.
 
Pero si inconsciente no sentía que se le quemaba el brazo, menos sintió el golpe al caer sobre otra persona, pues Rubén no lo alcanzó a cachar, ya que esperaba que cayera a su derecha y nomás vio cómo le pasó por un lado Arturo.

Vagamente retiene la imagen de un par de señoras que también sabían resucitación cardiopulmonar: "Mi'jo, ¿te acuerdas qué pasó mi'jo? Chocaste, qué bueno que estás macizo", le dijo una de ellas.
 
Después de rescatar al accidentado, con una pipa sofocaron el fuego antes de que arribara la Cruz Verde o Protección Civil.
 
En el negocio aplauden la acción de Daniel y sus compañeros, quienes no dudaron en ayudar a Arturo, que estuvo a casi nada de perecer quemado. Sus padres, Victoriano y María Elena, tampoco sabían quién ayudó a su hijo; están en deuda con el gesto de los trabajadores: "Estuvieron en el momento, hay pocos, luego luego se vio, si no, no lo cuentan", dijo su padre,
 
"Se siente bien que alguien se haya preocupado por sacarlo a uno, porque ya no hay mucha gente de esa. Le doy gracias al camarada, no lo conozco, pero muchas gracias, de parte del "Chicles".