Falla control en desechos tequileros

GUADALAJARA, JALISCO (23/JUL/2013).- “Allá para arriba es agua limpia. Donde empiezan las empresas tequileras es agua sucia de lo que descargan”, apunta sobre el Río Atizcua Aurelio González, habitante de Tequila desde hace 60 años, algunos de ellos gastados como trabajador en las tequileras. Donde señala su dedo acaban de caer residuos de agave exprimido. Sobre las rocas hay montones de bagazo, del que se extraen los jugos para el tequila, que sueltan vapor y se pierden en el arroyo; ahí se construyeron unos lavaderos comunitarios, que ahora son punto turístico.

Los vecinos saben que las tequileras descargan sus residuos a los ríos, pero ellos no resienten contaminación. Sin embargo, pese al esfuerzo de la industria y aunque el mercado internacional solicita cumplir requerimientos ambientales, todavía queda la mitad de la vinaza sin tratar. Es decir que millones de litros de residuos líquidos resultantes de la destilación del tequila se arrojan a ríos y arroyos con todo su potencial de contaminación.

Esto significa que en 2012 resultaron unos 925 millones de litros de vinaza sin tratar, pues por cada litro de la bebida se producen en promedio 10 de vinaza y el año pasado cerró con 184.8 millones de litros de tequila, informa Martín Muñoz, del Consejo Regulador del Tequila (CRT).

El porcentaje de la vinaza que no se trata corresponde a empresas pequeñas que carecen de recursos: unas 90 de las 159 que integran el CRT. Un panorama de solución podría ser que llegue tecnología económicamente viable y que las autoridades las apoyen financieramente, comenta Muñoz.

La Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial (Semadet) explica que ha tenido acercamiento con la industria y brindará soporte en procesos de gestión y capacitación. El problema es que la dependencia ignora cuán grave es el daño, porque no lleva registro de las descargas y tratamiento de los desechos tequileros, confirma la secretaria Magdalena Ruiz Mejía.

Al panorama se añade que ni la Semadet ni la Comisión Estatal del Agua (CEA) tienen información actualizada sobre las empresas en donde sí hay plantas de tratamiento instaladas.

Por su lado, las 70 empresas que integran la Cámara Nacional de la Industria del Tequila (CNIT) afirman que someten a tratamiento su vinaza, y siete están en proceso de estandarización para lograr resultados totales. “(Menos de 10 industrias) han tenido un proceso con variaciones y es donde estamos trabajando mucho, desde 2008, cuando se conformó el Comité de Ecología aquí en la industria”, explica Eduardo Orendain, presidente del organismo.