Realizan procesión de ataúdes por calles del Centro tapatío

GUADALAJARA, JALISCO (26/OCT/2012).- En honor a la muerte y las celebraciones que para ella se avecinan, alumnos del Centro Universitario de Artes, Arquitectura y Diseño (CUAAD) de la Universidad de Guadalajara (UdeG) prepararon una particular manifestación de culto: una procesión de ataúdes que recorrió el Centro de Guadalajara.

Este viernes por la tarde, los estudiantes tomaron las vialidades del primer cuadro y, con un féretro atrás de otro en hombros, recorrieron la Avenida Juárez para dar una pequeña muestra de lo que se espera en el segundo "Festival de la Muerte en Artes", que arrancará oficialmente el próximo miércoles 31 de octubre.

Los diseños, que ya se exponen en el centro universitario, son por demás variados. Un caballo del apocalipsis  encabezó la procesión, pero atrás de él se encontró un ataúd pintado cual camión del transporte público, signado con toda intención como la ruta "666".

Uno más, que era arrastrado por un carrito de supermercado, dejaba ver a un bien elaborado cadáver tratando de salir de él. Su parecido con el ex presidente Carlos Salinas de Gortari era evidente, pero la duda sobre su identidad pronto se disipó: "Pues sí es él, ¿Qué no le ves las orejotas?", explicó con picardía uno de los jóvenes que le empujaban.

"¿Y estos qué se traen?", expuso una adolescente cubierta con su uniforme colegial, a una compañera por demás parecida a ella. Las críticas que recibían los integrantes del desfile mortuorio eran varias, pero su cometido se había logrado: ni automovilistas ni los cientos de peatones que recorren a diario el primer cuadro de la ciudad dejaron de observarlos.

Aunque tomaron un carril de la Avenida Juárez, e hicieron lo propio en su regreso al CUAAD por Hidalgo, su recorrido no dificultó la circulación. El claxon de los vehículos sonó y sonó; la alegría de los niños que, en los semáforos en rojo, se hallaban cara a cara con un muerto viviente saliendo de su última morada, igual atrajo llantos, sorpresa y risas de su parte.

La Secretaría de Vialidad se sumó a la movilización para evitar complicaciones viales. Éstas no se presentaron; el contingente fue breve. "Eran 18 ataúdes, pero sólo vinieron como 14", explicó al respecto Andrés González, uno de los profesores que trabajó en el festival y acompañó al grupo.

Este viernes por la tarde la muerte salió en procesión a las calles. El rostro que no se conoce, pero que en todos se piensa como el de una catrina, tuvo réplica en decenas de jóvenes que con pintura blanca y negra plasmaron a la dama de la guadaña en su rostro.

EL INFORMADOR / ISAACK DE LOZA