Suman hoy tres ejecutados en el Estado

JOCOTEPEC, JALISCO (22/NOV/2011).- Tres homicidios más se registraron en diferentes municipios de la Entidad, cuyos homicidas utilizaron sus armas de fuego, sogas y un objeto de gran peso para aniquilar a sus víctimas.

En primer homicidio ocurrió en la Región Ciénega, donde fue localizada una víctima por vecinos que circulaban por la carretera que conduce de Jocotepec a Tizapán, a la altura del fraccionamiento Roca Azul.

Al mencionado lugar, acudieron elementos de la Dirección de Seguridad Pública de Jocotepec, quienes aseguraron la zona, mientras que acudía el agente del Ministerio Público adscrito a ese municipio, y esperaban el arribo de personal del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF).

La víctima es un joven que aparenta una edad aproximada de 30 años, quien estaba amarrado con vendas y se le apreciaba un surco en el cuello; él fue llevado a la morgue ubicada en la cabecera municipal de Ocotlán, donde se espera que sea reconocido por sus familiares, para que las indagatorias en torno a su asesinato puedan ayudar a esclarecerse.

El segundo caso fue reportado al mediodía de este martes, en calles del municipio de Tlaquepaque, por vecinos quienes también encontraron al fallecido.

La persona que reportó la localización del cadáver, dijo que se encontraba tirado sobre el Camino Antiguo a Tlajomulco y la calle Loma, en proximidades del fraccionamiento Los Olivos.

El hombre que aparentaba una edad de 35 años, no fue identificado; éste vestía calzado deportivo negro, pantalón de mezclilla azul y una playera azul, además que tenía varios balazos en su cuerpo.

Por último, la mañana del lunes, una patrulla de la Dirección de Seguridad Pública de Ixtlahuacán de Los Membrillos, acudió a 300 metros de una brecha ubicada, en el cruce de Los Cedros  en proximidades de la carretera Santa Rosa – La Barca.

En ese punto, fue localizado el cadáver de un hombre de casi 50 años de edad, que vestía pantalón de mezclilla negro y camisa a cuadros gris.

Además el hombre, tenía tapado el rostro con una bolsa de color rosa y las manos atadas. Paramédicos que acudieron explicaron que la víctima tenía fuertes golpes en todo su cuerpo y que tenía huellas de asfixia.

El cuerpo fue llevado a la morgue de la Zona Metropolitana de Guadalajara, donde se le aplicó la necropsia de ley, pero aún no ha sido reconocido, ni reclamado por sus familiares.

EL INFORMADOR / OMAR RUVALCABA