La música da el toque sensual al homenaje

GUADALAJARA, JALISCO (30/JUL/2011).- El concierto de la Orquesta Filarmónica de Jalisco cumplió con creces su objetivo en el homenaje al cardenal Juan Sandoval de parte del Gobierno de Jalisco.

Un ejemplo de ello: presente en el evento, el arzobispo de Acapulco, monseñor Felipe Aguirre Franco, mostró su gozo al escuchar el Danzón número dos de Arturo Márquez y Las bodas de Luis Alonso. Este prelado, melómano irredento y ex director de la Schola Cantorum del seminario tapatío hace unas décadas, sí que se regodeó con la sensualidad de estas ejecuciones y lo demás del programa: la obertura de las Bodas de Fígaro (Mozart), el quinto movimiento de la Sexta Sinfonía de Beethoven y el intermezzo sinfónico de la Cavalleria Rusticana de Mascagni.

Una parte del homenaje, el cardenal estuvo en el palco central del Teatro Degollado, flanqueado por el gobernador Emilio González Márquez y el secretario general de Gobierno, Fernando Guzmán Pérez Peláez. Posteriormente estuvieron en el escenario para las palabras alusivas al acto.
 
La concurrencia más numerosa fue del sector eclesiástico y ahí hubo clérigos de diversas generaciones, desde algunos longevos coetáneos del homenajeado. En el acto, el gran ausente fue el nuncio del Vaticano en México: Christophe Pierre.

Entre los presentes, figuró el obispo auxiliar Leopoldo González, quien tuvo como compañero de asiento al rector de la Universidad del Valle de Atemajac, Guillermo Alonso Velasco; ambos comentaron en un intermedio de las noticias recientes del tema de la sucesión en el arzobispado tapatío. Otros obispos asistentes fueron el también auxiliar tapatío Francisco González, el titular de Aguascalientes, José María de la Torre, y el prelado del Nayar, Jesús González.

Como suele pasar en todos los conciertos, al final de éste se relajó el orden y hubo una invasión de gente de atrás a los asientos delanteros del teatro, por lo que se ocuparon los vacíos cuando se entregó el reconocimiento al cardenal de parte del gobernador y su secretario de Gobierno; y el representante del Congreso de Jalisco, el diputado panista José Antonio de la Torre.

En el homenaje no se dejaron ver los dirigentes de las actuales cúpulas empresariales (salvo el industrial Manuel Herrera), pero sí fueron algunos que han tenido cargos en ellas, como el ex presidente del sindicato patronal Luis de la Peña y los ex dirigentes de la Cámara de Comercio, José Luis Covarrubias Valenzuela y Julio García Briseño.

Entre los políticos asistentes, prácticamente sólo fueron del actual partido en el Gobierno y varios secretarios del gabinete del gobernador, como los de Salud, Finanzas y Cultura, Alfonso Petersen, Martín Mendoza y Alejandro Cravioto, entre otros funcionarios del organigrama del Poder Ejecutivo.

FRASES

''Lo que realmente nos indigna es que se estén robando el dinero en el Congreso del Estado, eso a los industriales de Jalisco sí nos preocupa ''

Manuel Herrera Vega, coordinador de Cámaras Industriales en Jalisco.

''Es un personaje que ha hecho muchas cosas por el Estado, como cualquier ciudadano más expresa sus puntos de vista ''

Abraham González Uyeda, diputado local.

INCONFORMIDAD CON EL GASTO
Protestan afuera del Degollado

Poco más de un veintena de inconformes se plantaron frente al Teatro Degollado, donde se realizó el homenaje al cardenal Juan Sandoval Íñiguez, que fue organizado por el Gobierno de Jalisco y tuvo un costo de más de 400 mil pesos.

En punto de las 17:30 horas los manifestantes comenzaron a llegar y mostraron las cartulinas alusivas a la inconformidad que algunos jalisciense expresaron por el recurso estatal que se utilizó para festejar al líder espiritual de la Iglesia Católica en Jalisco.

Frases como “Cardenal, aval del fraude electoral”, “¿Y el Estado laico, a’pá?”, “Emilio, Fernando; el Estado es laico”; “La iglesia no debe formar parte del poder”; “Señor cardenal, recuerde que pedir intervención extranjera, es traición a la patria”, fueron expuestas gran parte del tiempo que duró el concierto.

Sin embargo, los carteles con las frases resultaron incómodos para algunos católicos que, molestos, insultaron a los manifestantes, quienes también respondieron, pero en un tono menor a las ofensas verbales que recibieron.

Jaime Arias Amaral, uno de los opositores al homenaje, dijo no estar conforme con la actuación del gobernador,  de utilizar dinero público para favorecer a un grupo religioso.

“Como dicen, lo de Dios a Dios, lo del César al César; y no es justo que se destine dinero del Estado a favor de la Iglesia”.

Ya iniciado el concierto, los manifestantes no dejaban de hacer ruido para llamar la atención de los invitados y transeúntes.

Pero la euforia no duró todo el evento musical, pues 10 minutos antes de que terminara ya no había nadie, y sólo se quedaron  los seguidores de Sandoval Íñiguez.