Presa El Zapotillo, en vilo por anomalías

TEMACAPULÍN, JALISCO.- La Comisión Nacional del Agua (Conagua) tendrá que detener sus planes para dar vida a la presa El Zapotillo, en Jalisco. Al descontento de comunidades afectadas, que se oponen a la inundación de sus pueblos, se suman las inconformidades que compañías participantes en la licitación para la construcción de la obra hidráulica presentaron ante la Secretaría de la Función Pública (SFP).

Además, en la licitación para diseñar y construir la obra, la Conagua usó un permiso ambiental que no corresponde a las características de la presa El Zapotillo.

El 14 de septiembre, la Conagua anunció que el consorcio encabezado por La Peninsular Compañía Constructora, Grupo Hermes (ambas de Carlos Hank Rhon) y la española FFC Construcción, resultó ganador de la licitación pública para el diseño y construcción de la presa El Zapotillo. Conagua tenía contemplado firmar el contrato el 14 de octubre.

Sin embargo, dos de los siete participantes en la licitación presentaron inconformidades por el fallo que nombró ganador al consorcio encabezado por las empresas de Carlos Hank Rhon.

Funcionarios de la SFP confirmaron a EL UNIVERSAL que, de acuerdo con la Ley de Obras Públicas y Servicios Relacionados con las Mismas, ahora la Dirección General de Controversias y Sanciones en Contrataciones Públicas de la secretaría determinará si se suspende el proceso de licitación para el diseño y construcción de la presa El Zapotillo.

Licitación en la mira

El 20 de noviembre de 2008, Conagua abrió la convocatoria para la licitación pública internacional 16101037-063-08 para el diseño y construcción de la presa El Zapotillo en el río Verde, la cual se planea construir en los municipios de Cañadas de Obregón y Yahualica, Jalisco.

El 14 de septiembre se dieron a conocer los resultados de la licitación, de acuerdo con el acta de fallo que está disponible en el sitio web de Compranet.

Ese día, la Conagua anunció que de las siete propuestas presentadas, se desechaba a cuatro porque “presentaron incumplimientos”. Un comunicado de prensa difundido por la comisión explica que las propuestas se desecharon “por diversos motivos, principalmente por no cumplir con los requisitos especificados en las bases de la licitación”.

El consorcio que ganó la licitación fue el formado por las empresa de Carlos Hank Rhon, La Peninsular y Grupo Hermes, así como por la española FCC construcción, que presentó un presupuesto para diseñar y construir la obra de 2 mil 194 millones de pesos.

Entre las propuestas desechadas había presupuestos que eran hasta 40% menores al ganador.

Por ejemplo, la propuesta del consorcio formado por Cota, Vise e Infrocsa presentó un presupuesto de mil 572 millones de pesos e ICA participó con uno de mil 952 millones de pesos.

Si se comparan las cifras se puede observar que hay una diferencia de 622 millones de pesos entre el presupuesto ganador y una de las propuestas que fueron desechadas por la Conagua.

El consorcio Cota, Vise e Infrocsa, así como la empresa ICA, presentaron ante la Secretaría de la Función Pública recursos de inconformidad contra el resultado de la licitación.

Con este recurso, la Conagua no podrá firmar el contrato de construcción con el consorcio ganador, hasta que se aclaren las inconformidades de los participantes o la Función Pública determine si se suspende el proceso de licitación.

Hasta el 25 de septiembre pasado, la Conagua no había recibido “ninguna notificación” de la Secretaría de la Función Pública sobre las inconformidades presentadas a la licitación pública para el diseño y construcción de la presa El Zapotillo, de acuerdo con Raúl Antonio Iglesias Benítez, director general del organismo de cuenca Lerma-Santiago-Pacífico de la comisión.

Incluso, en entrevista telefónica, el funcionario aseguró que el contrato con el consorcio ganador se firmaría “el 14 o el 15 de octubre y ahí ya podemos empezar (la construcción de la obra)”.
 
Una presa sin permisos

En el proceso de licitación para la presa El Zapotillo, Conagua presentó un permiso ambiental que no corresponde a la obra que se licitó.

La Conagua distribuyó entre los participantes en la licitación para que tuvieran más elementos en el cálculo de su presupuesto, copia de una Manifestación de Impacto Ambiental (MIA), permiso de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) necesario para poder realizar la obra hidráulica, que no corresponde a las medidas que tendrá la presa.

En el expediente de la licitación pública para la construcción de la presa El Zapotillo, disponible en el sitio de Compranet, es posible corroborar que en la tercera junta de aclaraciones para la licitación del 17 de febrero del 2009, se notifica a los participantes que se proporciona “en medio electrónico a los licitantes, la carpeta MIA-Zapotillo, conteniendo la Manifestación de Impacto Ambiental y su resolutivo”. Incluso se menciona que se trata de la MIA No S.G.P.A/DGIRA:DDT.-1310/06, que Semarnat autorizó a Conagua el 22 de junio de 2006.

EL UNIVERSAL cuenta con una copia de la MIA aprobada por la Semarnat, y en ella se especifica que la cortina de la presa tendrá una altura de 80 metros, que su embalse ocupará una superficie de 2 mil hectáreas y que tendrá un almacenamiento de 411.6 metros cúbicos. Sin embargo, la obra que licitó la Conagua tiene otras características: una cortina con una altura de 105 metros, un área de embalse de 3 mil 800 hectáreas y un almacenamiento de 911 metros cúbicos.

La misma resolución de la MIA que entregó Semarnat a Conagua resalta en el Término Tercero que: “la presente resolución no autoriza la realización de otro tipo de actividades que no esté comprendidas” en este documento.

También dice que si Conagua decide hacer “cualquier actividad diferente a la autorización, deberá solicitar a la Dirección General de Impacto y Riesgo Ambiental, para su evaluación, la Manifestación de Impacto Ambiental respectiva”.
Incluso resalta que “queda prohibido desarrollar actividades distintas a las señaladas en la presente autorización”.
 
En la misma autorización ambiental se menciona que la Semarnat, a través de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa)vigilará el cumplimiento de la MIA.

EL UNIVERSAL preguntó a Iglesias Benítez si contaban con la Manifestación de Impacto Ambiental para la presa con una cortina de 105 metros. “Sí, está aprobada por la Semarnat…. En lo de la Manifestación de Impacto Ambiental nos apoyaron en oficinas centrales en México, ellos han hecho todo”, dijo.

Cabe recordar que los gobiernos federal y los de Jalisco y Guanajuato anunciaron el proyecto de la presa El Zapotillo en mayo de 2006. En ese entonces, el gobierno de Jalisco y Coangua aseguraron que la presa tendría una cortina de 80 metros. También se anunció que inundarían Acasico y Palmarejo.

Meses después, anunciaron que la cortina sería de 150 metros y, con ello, su embalse ocuparía un área de 4 mil 500 hectáreas, por aumentaba el área a inundar. Con estas medidas, no sólo los pobladores de Acasico y Palmarejo tenían que ser reubidados, también se afectaba al pueblo de Temacapulín.

La Conagua, instancia federal responsable del proyecto, ha defendido el proyecto de la presa El Zapotillo, el cual tendrá un costo aproximado de ocho mil 10 millones de pesos, señalando que tendrá varios beneficios en la región. Sobre todo, asegura que permitiría dotar de agua potable a la ciudad de León, Guanajuato (un millón 95 mil habitantes); a 14 municipios de los Altos de Jalisco (316 mil personas) y a parte de la zona conurbada de Guadalajara (950 mil personas).

Un respiro para las comunidades
 
Los pobladores de Temacapulín, Acasico y Palmarejo se han organizado y realizado diversas acciones para evitar que sus pueblos desaparezcan del mapa. El pasado 25 de septiembre obtuvieron un triunfo en su resistencia contra la presa El Zapotillo.

El cabildo del municipio de Cañadas de Obregón no aprobó el cambio de uso de suelo, un proceso necesario para la constricción de la presa con una cortina de 105 metros. También se canceló el plan de desarrollo para el nuevo centro de población, debido a que se requiere una consulta pública.

Hasta dentro de seis meses se volverá a reunir el cabildo y se tratará el tema del cambio de uso de suelo.

El mismo 25 de septiembre, en entrevista con EL UNIVERSAL, Raúl Antonio Iglesias Benítez, aseguraba que si el cabildo de Cañadas de Obregón otorgaba el cambio de uso de suelo, “estarían todos los trámites legales necesarios para iniciar la construcción... En toda la superficie en donde se va a hacer algún movimiento de palada de tierra, toda esa, la tenemos a entera satisfacción con todos los tramites de permisos... Tenemos todo en nuestro poder”.

Alberto Szekely, abogado y miembro del Observatorio Ciudadano de Vigilancia Ambiental, explica que si la Conagua, a través de la empresa que ganó la licitación, comienza a construir la presa El Zapotillo, estaría violando la Ley General de Equilibrio Ecológico y Protección Ambiental (LGEEPA), al no contar con la autorización para realizar la obra.
 
Las impugnaciones a la licitación pública para edificar la presa y la falta de manifestación de impacto ambiental de la obra dan otro respiro a los pobladores de Temacapulín, Acasico y Palmarejo.
 
Numeralia

2 mil 194 mdp: costo del proyecto del consorcio ganador

Cota, Vise E Infrocsa ofertó: mil 572 mdp en su propuesta, que fue desechada por la Conagua.

EL UNIVERSAL