Turquía denuncia falta de cooperación europea contra terrorismo

WASHINGTON, ESTADOS UNIDOS (31/MAR/2016).- El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, dijo el jueves a la cadena CNN que los países occidentales no respondieron a las expectativas turcas en materia de intercambio de información, en momentos en que el mandatario se encuentra en Washington para participar de una cumbre sobre seguridad nuclear.

"Ni los Países Bajos, ni Bélgica parecen haber entendido lo que los yihadistas representan", dijo Erdogan según un extracto de una entrevista que será difundida este jueves.

"Hemos llamado a adoptar una posición común contra el terrorismo, y muchos países europeos no le dieron a este llamado la importancia que merece", explicó el dirigente turco.

"Los países occidentales nos han ignorado. No se ha respondido a nuestras expectativas en materia de intercambio de información de inteligencia", añadió.

Las autoridades belgas fueron acusadas de laxitud en la lucha contra el terrorismo, después de los atentados del 22 de marzo en Bruselas que dejaron 32 muertos y 340 heridos.

El gobierno turco reprocha especialmente a Bélgica haber ignorado las informaciones que transmitió sobre el perfil del "combatiente terrorista" Ibrahim El Bakraoui, quién se hizo estallar en el aeropuerto de Bruselas, y que había sido arrestado anteriormente por Ankara cerca de la frontera siria.

El día en que los turcos lo expulsaron hacia Amsterdam, en julio de 2015, las autoridades de Ankara avisaron a las embajadas belga y holandesa a último momento. Ningún servicio de seguridad esperó a El Bakraoui a su llegada a Europa y desapareció de los radares.

Según el gobierno holandés, El Bakraoui pudo entrar al país porque no figuraba en la lista de personas sospechosas y no era conocido por las autoridades.

Turquía fue durante mucho tiempo percibido por Estados Unidos como un aliado musulmán clave, y una fuerza moderada de estabilización  en la región.

Las relaciones se han crispado en los últimos meses debido a la situación en Siria. Washington pide a Turquía que haga más para combatir al grupo Estado Islámico, mientras Ankara expresa su frustración por el apoyo estadounidense a los combatientes kurdos.