Los partidos pequeños ganan terreno en Europa

MADRID, ESPAÑA (27/MAY/2014).- Francia, uno de los países de tradición más europeísta, y Reino Unido, el menos afín a la Unión Europea (UE), tienen un elemento en común. Las opciones populistas y antieuropeas han ganado terreno en las elecciones europeas, un elemento que consolida el auge eurófobo como nuevo fenómeno de estos comicios. Aunque su peso es reducido sobre el total de eurodiputados y su capacidad para unir esfuerzos, dudosa, la subida de estas opciones extremas evidencia el malestar y el desconcierto de muchos ciudadanos europeos ante la peor crisis de la historia del proyecto comunitario.

Poco más de 20% de los sufragios emitidos durante las elecciones parlamentarias en Europa fueron para alguna opción euroescéptica, populista o eurófoba, según los resultados emitidos por la Eurocámara. Al menos 9% del electorado europeo optó por formaciones de nueva creación. Esta categoría engloba a una amalgama de partidos que sin duda traerán nuevos aires a la Eurocámara. También suben cuatro escaños los no inscritos, un grupo ahora formado por parte de los diputados del británico UKIP y del italiano Liga Norte, los representantes del húngaro xenófobo Jobbik o los del holandés antimusulmán PVV, de Geert Wilders.

Los primeros sondeos a pie de urna acercaban al Frente Nacional de Marine Le Pen al 25% del electorado, lo que la consagra como la más votada en Francia. También en Reino Unido el populista UKIP se hizo con la victoria y en Dinamarca, la extrema derecha venció con 23% de los votos para el Partido Popular, contrario a la UE. En Alemania, una formación antieuropea (Alternativa por Alemania) conseguió 7% de las papeletas y entrará en la Eurocámara. En Austria, el partido de los eurófobos, el FPÖ, se llevó casi 20% de los votos.

En otros países, la pulsión del eurodesencanto parecía menor. En Holanda, el partido de Geert Wilders, mantiene sus cuatro escaños., según los primeros resultados, y en Polonia, el ultraconservador Solidaridad también cae, según los sondeos.

Una de las caras más dramáticas del ascenso de estos movimientos es el fuerte impulso de los neonazis en Grecia. El partido Aurora Dorada logró, según las primeras estimaciones, alrededor de 10% de los votos, lo que le puede proporcionar hasta tres representantes en la Cámara de Estrasburgo.

Las corrientes antieuropeas y populistas en general han estado hasta ahora muy diluidas en el Parlamento Europeo. La mayoría se aglutina en torno a dos grupos: el de no inscritos —no adheridos a ningún grupo tradicional— y el de Europa de la Libertad y la Democracia. Juntos sumó 8% de los escaños en la pasada legislatura, aunque no tienen unidad de acción ni de voto. No obstante, no todos los no inscritos son populistas. En este grupo figura, por ejemplo, el representante español de UPyD, Francisco Sosa Wagner, y otros diputados que no comparten en absoluto el ideario antieuropeo.

Otro 7% de los representantes correspondía a euroescépticos tradicionales (toriesbritánicos y conservadores polacos principalmente). Este grupo redujo significativamente su influencia, en buena medida por la caída de la popularidad de los conservadores británicos. Pese a todo, este grupo celebró el auge del euroescepticismo en el Parlamento Europeo.

Con información de El País

CONSECUENCIAS EN ESPAÑA

Inició la batalla por el control del (Partido Socialista Obrero Español (PSOE), luego de haber obtenido sólo 23% de los votos en las elecciones parlamentarias europeas celebraras el domingo. Se harán movimientos visibles para elegir al candidato para los comicios generales de 2015.

La derrota de los socialistas ante un Partido Popular (PP) desgastado y debilitado tras dos años en el Gobierno, deja a su dirigente, Alfredo Pérez Rubalcaba, en una situación de máxima debilidad para afrontar ese proceso de renovación. Realizarán un contreso extraordinario el 19 y 20 de julio.

La Ejecutiva federal decidió iniciar la renovación de forma inmediata y sin la participación de Rubalcaba. “El congreso servirá para elegir una nueva dirección del partido”, aseguró.

“Lo que hago es asumir la responsabilidad política por los malos resultados, y esta decisión ha sido absolutamente mía”.

A pesar de ganar los comicios, el Partido Popular (PP) perdió 16 puntos porcentuales respecto a los de 2009, por lo que Mariano Rajoy anunció ante la dirección de su partido la puesta en marcha de un plan de dinamización con el objetivo de recuperar el apoyo electoral perdido. Además hizo hincapié en que los datos de esas elecciones no son extrapolables a unas elecciones generales.

SABER MÁS
Hay pesimismo

Tras el triunfo de la extrema derecha hay una crisis de credibilidad, dicen expertos. El diario “Le consideró que hay una ‘ola eurófoba’”.