Descartan que terroristas perpetraran los atentados

OSLO, NORUEGA (23/JUL/2011).- El reloj marcaba las 15:30  horas en Oslo, capital noruega, cuando estalló una bomba. Momentos después un solo hombre abrió fuego en un campamento laborista en la isla Utoya, cerca de la capital en el que por lo menos 80 jóvenes murieron.

El hombre que abrió fuego fue detenido y también está vinculado al atentado en Oslo. Es un ciudadano noruego asociado a grupos de extrema derecha, por lo que las autoridades descartan que los atentados hayan sido perpetrados por extremistas radicales y apuntan a grupos locales. Cabe señalar que el Gobierno noruego se concentra en Oslo y el actual partido en el poder es de izquierda.

“Sería muy raro que los islamistas tuvieran un enfoque político tan local. El ataque al campamento de los jóvenes socialistas sugiere otra cosa. Si los islamistas querían atacar, hubieran podido poner la bomba en un centro comercial en lugar de una isla remota”, declaró Jakub Godzimirski, investigador del Instituto Noruego de Asuntos Internacionales.

Hasta ayer, los atentados eran algo ajeno a los noruegos. Lo más que habían recibido eran amenazas por su participación en la guerra en Afganistán y en la misión de la OTAN para ayudar a la población civil en Libia.

En julio de 2010, la Policía desarticuló una célula de la red terrorista Al-Qaeda en Noruega y Alemania. Tres personas fueron detenidas. De acuerdo con la prensa local, la célula preparaba un atentado al estilo del de marzo de 2004 en Madrid (11-M).

Aun así, era una célula “de fuera”. Las autoridades noruegas no tienen conocimiento de que exista grupo terrorista local alguno.

La primera hipótesis, que el ataque había sido perpetrado por extremistas radicales, tenía dos fundamentos: el nivel de alerta que se elevó desde 2006, cuando la publicación, en la prensa de los países nórdicos, de caricaturas que ridiculizaban al profeta Mahoma, desató la ira de los musulmanes, protestas y amenazas de ataques.

Analistas internacionales subrayaron el impacto que los hechos de ayer tienen en un país acostumbrado a políticas pacifistas. Algunos incluso llegaron a llamarlo “el 11 de septiembre de Noruega”.

El país, que entre otras cosas entrega el Premio Nobel de la Paz, es reconocido por sus políticas que favorecen las libertades individuales y la apertura cultural; es célebre por conceder asilo a refugiados políticos.

El tiroteo

El hombre, armado con un fusil automático, habría sacado ventaja de la confusión causada por la explosión para atacar en el campamento de verano del Partido Laborista, según la prensa local.

“Se oyeron muchos disparos. Nos escondimos debajo de una cama. Fue muy aterrador”, dijo una joven que estaba en Utoya.

“Lo vi con mis propios ojos, al menos 20 muertos flotando en el agua”, dijo Andre Skeie, de 26 años, quien había ido a la isla en su barco para ayudar a evacuar a la gente.

PERFIL
Un nacionalista, el único señalado

Anders Behring Breivik

Sólo hay un sospechoso por la masacre en Noruega: Anders Behring Breivik, un hombre de 32 años, nativo de Oslo e identificado como nacionalista vinculado a la extrema derecha. En 2001 habría sido arrestado con armas; ayer, en su departamento, fueron hallados dos uniformes de policía y explosivos. Al parecer era un activo participante de foros nacionalistas en internet, que critica al Gobierno y a los medios por no condenar la presencia del islam en el país.

EL PAÍS HOY
Noruega

Población: 4’691,849.
Tipo de Gobierno: Monarquía constitucional.
Capital: Oslo
Superficie total: 323,802 km²
Economía: combina la actividad de libre mercado y la intervención del Gobierno, que controla áreas clave como el sector petrolero, del que es altamente dependiente. Optó por permanecer fuera de la Unión Europea. Después de un sólido crecimiento en 2004-07, la economía se desaceleró en 2008, pero volvió a un crecimiento positivo en 2010.
Religión: Iglesia de Noruega: 85.7% de la población, pentecostal 1%, católica 1%, otros cristianos 2.4%, musulmanes 1.8%, otros 8.1 por ciento.
Lengua: noruego.
Moneda: corona.

CRONOLOGÍA
Atentados en países escandinavos

28 de junio de 1999

Suecia: una pareja de periodistas y su hijo menor de  ocho años resultaron heridos tras la explosión de su vehículo en los alrededores de Estocolmo. La pareja había recibido amenazas de muerte de organizaciones  neo-nazis, después de haber publicado en el periódico sueco Expresen una investigación sobre una editora de discos de Milán (Italia) que publicó música en que se hacía la apología de la “raza blanca”.

11 de octubre de 2002

Finlandia: siete personas, entre ellas el kamikaze, murieron.  Mientras que otras 80 resultaron heridas en un atentado suicida en  un centro comercial de Vantaa, al Norte de Helsinki. La motivación del autor  del atentado, Petri Gerdt, un estudiante en química de 19 años, es desconocida.

REACCIONES
La comunidad internacional, conmocionada

México

El Gobierno de México “expresa su consternación por la explosión registrada hoy (ayer) en el centro de la ciudad de Oslo, Noruega, y expresa sus condolencias y  solidaridad al pueblo y al gobierno de Noruega por la pérdida de vidas  humanas”, señaló a través de un comunicado la secretaría de Relaciones Exteriores.

Estados Unidos

El presidente estadounidense Barack Obama envió condolencias a Noruega tras los ataques y urgió a los países del mundo a cooperar para combatir el  terrorismo. Estos ataques son “un recordatorio de que la comunidad internacional en su conjunto tiene el desafío de prevenir este tipo de terrorismo y cooperar en el ámbito de los servicios de inteligencia”.

Organización de las Naciones Unidas

“El secretario general (Ban Ki-moon) está horrorizado tras enterarse de la gran explosión producida en el centro de Oslo y el tiroteo que tuvo lugar en Utoya”, señaló el portavoz de Ban, Martin Nesirky, en un comunicado. El máximo responsable de la ONU condenó el uso de la violencia al tiempo que recordó que “Naciones Unidas está al lado del pueblo noruego en este momento tan terrible”.

Italia

El presidente de la República Italiana, Giorgio Napolitano, calificó los ataques de “sangrientos y viles actos terroristas”, también expresó solidaridad con el pueblo noruego y manifestó consternación por lo sucedido. En la misma línea, el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, envió un mensaje a su homólogo noruego, Jens Stoltenberg, en el que expresó su profundo pesar por las víctimas en el ataque.

España

El presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, transmitió al primer ministro de Noruega, Jens Stoltenberg, la solidaridad de su país ante la explosión que tuvo lugar en Oslo.  Dijo estar “profundamente conmocionado por la explosión”.

Francia y Reino Unido

El presidente francés Nicolas Sarkozy calificó  de “acto odioso e inaceptable” el atentado perpetrado. En Londres, el ministro de de Relaciones Exteriores William Hague condenó  asimismo el atentado y manifestó la solidaridad de Reino Unido con Noruega  frente a “tales atrocidades”.