A la denuncia anónima que puso en tela de juicio los momentos luminosos que en su momento propios y extraños reconocieron al ministro Arturo Zaldívar cuando fue presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), al ser el autor de proyectos de avanzada en materia de ampliación de libertades y en la defensa de las garantías individuales de los mexicanos, se unió desde la semana pasada un obús desde las oficinas del Poder Judicial de la Federación en Zapopan. Si los defensores de Zaldívar que minimizaban las acusaciones de irregularidades por venir de una entrega de acusaciones que llegaron sin remitente a las oficinas de la presidenta de la Corte, Norma Piña, apareció Elba Sánchez Pozos, magistrada de Circuito adscrita al Cuarto Tribunal Colegiado en Materia Administrativa con sede en Zapopan a ponerle rostro.Esta funcionaria judicial federal se enfrentó al poderoso titular de la Corte desde 2019 cuando lo denunció siendo funcionaria en Cancún, Quintana Roo, de presiones por el caso de la periodista Lydia Cacho, quien señaló al empresario libanés Kamel Nacif de tener una red de pornografía, prostitución y trata infantil, y por ello de haberla torturado en 2005, luego de la publicación de su libro “Los Demonios del Edén”, en la que exhibe la complicidad del ex gobernador de Puebla, Mario Marín.Por ese caso fue readscrita a los juzgados de Culiacán y suspendida un año de funciones, luego de lo cual llega a Zapopan, tras haber denunciado a Zaldívar de abuso de funciones, de autoridad y de encubrir y resolver casos a modo.En medio de la defensa que desde la mañanera hizo ayer el Presidente Andrés Manuel López Obrador de Zaldívar, al señalar que se trata de un “linchamiento” político contra el ex presidente de la Corte, habrá que ver qué relevancia cobra la denuncia de esta magistrada en la investigación que abrió la ministra presidenta de la Corte, Norma Piña, a la que acusan desde el Gobierno de la 4T de ser aliada de la candidata opositora, Xóchitl Gálvez.Sus acusaciones van en el sentido que refuerzan las declaraciones que hizo López Obrador en febrero de 2023 al señalar que con Zaldívar como presidente de la SCJN se podía hablar con los jueces para atender asuntos de Estado y definir las resoluciones, y que demuestran la violación de la autonomía del Poder Judicial que permitió el ex titular de la Corte.Habrá que ver, pues, si desde Zapopan prosperan las denuncias contra Zaldívar, hoy en el ojo del huracán luego de su sorpresiva renuncia al cargo de ministro, y su inmediata incorporación al equipo de la ahora candidata presidencial de la alianza Morena-PT-Verde, Claudia Sheinbaum, que le dio la razón a sus detractores dentro de la SCJN, que en sus cuatro años como presidente del Poder Judicial Federal le pusieron el mote del “político con toga”, por su creciente cercanía con el Gobierno de López Obrador.jbarrera4r@gmail.com
