De Miami a Marruecos, la tendencia veraniega

GUADALAJARA, JALISCO (30/ABR/2015).- Las propuestas modistas para 2015 se asoman discretamente. A diferencia de 2014, en el que las tendencias llegaron con fuerza para instalar las siluetas minimalistas y los acentos vintage en el vestir cotidiano, este año los cortes y texturas dictarán un espíritu cauteloso en donde el contraste del color será la pauta para lucir diversos conceptos, desde el deportivo glamuroso, el ejecutivo chic, la elegancia urbana y el tribal africano.
 
Para Sofía Félix Smith, asesora de moda en El Palacio de Hierro en Guadalajara y experta en tendencias, este verano los conceptos que regirán el guardarropa estarán enfocados a trasmitir un estilo de vida en el que la búsqueda personal será el principal mensaje.
 
La idea para este año, según los expertos de esta tienda departamental, es crear ambientes que van desde lo tropical con Miami Beach, el espíritu bohemio de Marruecos y los “colores primarios” que se mezclan al arte pop contemporáneo.
 
Por su parte, Laura Carrillo, diseñadora de modas, destaca que prendas clave como la “boyfriend shirt”, las chaquetas de cuero y los tradicionales jeans serán piezas fundamentales para jugar con estas tres macrotendencias que ya comienzan a presumirse en las vitrinas de la ciudad.
 
En el caso de “Miami Beach”, como su nombre lo indica, hace referencia a la ciudad estadounidense para dar paso al estilo marino, pero también resaltando la arquitectura y glamour cosmopolita, con un concepto que aboga por un equilibrio de colores pastel en tonos más encendidos, pero que no radican en el neón. Aquí, los acentos en blancos servirán como un contraste en la saturación para lucir estampados florales, tropicales, frutales y lettering.
 
Marruecos, es la otra guía de vestimenta que tiene al efecto mosaico como protagonista en estampados y texturas. Los toques de terracota se suman a una silueta que evoca a la adrenalina del safari, además de entretejer joyería llamativa que recuerda la luminosidad de los azulejos.
 
Sin caer en el exceso del minimalismo, la tendencia de “colores primarios” destaca el retorno de siluetas más libres y ligeras pero con un toque deportivo y ultra chic, en que la combinación de prendas más formales como sacos se adaptan a puntos deportivos como los sneakers y pantalones capri, en una paleta en la que prevalece el uso indiscriminado del amarillo.

El punto común

Marsala es el color que protagoniza tanto en pasarelas internacionales como en las vitrinas de las pequeñas boutiques de la ciudad. Esta peculiar tonalidad que se mezcla entre el tinto y el púrpura mate, es la que idealiza los caminos a seguir en maquillaje, calzado, bolsos, vestidos de coctel y blusones, principalmente.
 
La gracia del marsala está en sus atributos camaleónicos que se adapta a cualquier tipo de piel, desde aquellos bronceados naturales claros, hasta los más calurosos destellos morenos, añadiendo un toque de sensualidad y feminidad que invitan a decir “menos es más” cuando de marcar tendencia se trata.

Aunque los estampados florales y animal print se resisten a desaparecer por completo, en 2015 el uso de éstos se reduce significativamente en las prendas, dejando el camino libre a las medias y calcetas para que luzcan por completo en relieves muy ligeros.

Cuero super chic

El sintético aparece nuevamente. Más allá de las chamarras para sobrevivir al frío, el cuero falso llega a modo de discretos cuellos, hombreras y laterales en los pantalones ligeros de mezclilla y algodón. Si bien esta tendencia ha permanecido desde hace dos años en las pasarelas, ahora será en colores más cálidos como el rosa pardo, mostaza, verde esmeralda, azul índigo y rojo manzana.

Aunque parece ilógico el vestir prendas plastificadas en plena temporada veraniega, se ha incrementado la integración de forros frescos al interior.

Distorsión

Los estampados que reinarán por completo, principalmente en blusas, serán los motivos tecnológicos que recuerdan las ondas electromagnéticas y de sonido, pero en siluetas que rendirán homenaje a la naturaleza, rostros de famosos y emblemáticas piezas de arte.

Las letras y figuras geométricas también se mantienen con popularidad, pero bajo una perspectiva minimalista que se concentra a combinarse directamente con el maquillaje y complementos de accesorios en pulseras, collares y aretes, principalmente, destacando las tonalidades en morado, amarillo, blanco y negro ahumado.

Terciopelos y encajes

La pasada primavera despuntó por el uso de transparencias en todo momento, este año el terciopelo y el encaje vienen a complementar esta tendencia ideal para refrescar la piel sin la necesidad de enseñar mucha piel.

La idea de los diseñadores internacionales parte en que trazos específicos de encaje cubran adecuadamente zonas como el busto, dando pie a la imaginación y sensualidad discreta al revelar un poco de los hombros, espalda y abdomen. En el caso del terciopelo, éste se proyecta para que delicadamente haga función de costuras gruesas en puños, cuello y escotes en “V”.

Resplandor medieval

El marsala un color que presume de opacidad y brillos mate, su combinación con otras tonalidades es tan amplia que puede figurar en cualquier concepto, desde vestidos de gala, pantalones y sacos ejecutivos, hasta faldas de tipo sirena. Firmas como Chanel, Versace y Dolce & Gabanna ya adelantan su potencial  en estampados que simulan los arlequines medievales de cuadricula perfecta, combinados al azul metálico, naranja oscuro y verde musgo. El concepto luce rescatando elementos de la monarquía como coronas y cuellos de acordeón, en sus estampados y cortes de falda campana y cardigans.