Miércoles, 24 de Abril 2024
Entretenimiento | Una mirada al cine de suspenso nacional

Cuando el cine mexicano intenta hacer 'thrillers'

'Diálogo interno' se encuentra en cartelera; se trata de la ópera prima de Germán Rodríguez

Por: EL INFORMADOR

'Diálogo Interno'. La cinta relata la investigación policial alrededor de un fraude financiero. ESPECIAL / Narratario Films

'Diálogo Interno'. La cinta relata la investigación policial alrededor de un fraude financiero. ESPECIAL / Narratario Films

GUADALAJARA, JALISCO (21/ENE/2015).- Diálogo interno” es la ópera prima del director Germán Rodríguez Quiñones, quien también funge como productor junto con Anet Baca Terán. Este ''thriller'' relata la investigación de un fraude financiero cometido al interior de una empresa. El director recurrió a una narrativa circular, al echar mano de analepsis. Las escenas confrontan la visión personal de cada personaje con la técnica de la grabación interna, donde el actor tiene un dispositivo ubicado en sus prendas para grabar y actuar al mismo tiempo. De esta forma se ponen en juego conceptos como la verdad y la subjetividad. Para Germán Rodríguez, no sólo la historia es importante, también cómo se cuenta. El director Rodríguez Quiñones también estuvo a cargo de la fotografía.

La preproducción de la película empezó en 2011: las escenas se grabaron en 2012, con locaciones y exteriores en la Ciudad de México. El protagonista de la historia es Juan Carlos (interpretado por Aníbal Navarro), el personaje que investiga a José Varela (Rubén Zerecero). Completan el reparto los actores Valeria Zomazy, Raúl Casillas, Luis José Sevilla, Eddy Vargas y Jorge Zepeda.

El Thriller en México

Bajo el anglicismo de "thriller" se engloba el cine que busca influir en las emociones del espectador a partir del suspenso, con la creación de atmósferas tensas en las que se desarrollan historias turbias.

En la historia del cine mexicano ha habido intentos por filmar cintas que representen dignamente al género, sin embargo, a decir del profesor en crítica cinematográfica, Luis Cruz, todo se ha quedado en buenas intenciones, pues los directores terminan por no aprender a hacer este tipo de filmes, al mezclar en ellos elementos que son propios de la comedia, entre otros géneros. Sin embargo, agrega, la cinematografía va dando pasos.

 Cabe señalar que desde los años de la época de oro del cine nacional ha habido producciones dentro del género, como aquella cinta emblemática llamada “Distinto amanecer” (1943, dir. Julio Bracho). El guión está basado en una novela de Max Aub, con la adaptación de él mismo, en conjunto con el director de la obra y el poeta Xavier Villaurrutia. La historia retrata las investigaciones surgidas a partir del asesinato de un líder sindical.

 A finales de los setenta se estrenó “La casa del pelícano” (1977, dir. Sergio Véjar), un "thriller" psicológico que explora las relaciones tormentosa entre una madre y su hijo. En los papeles de madre e hijo estuvieron Jacqueline Andere y Enrique Álvarez Félix.

 Las cintas “Canoa” (1975, dir. Felipe Cazals) y “Rojo amanecer” (1989, dir. Jorge Fons) están basada en hechos reales. Ambas están unidas por afinidades temáticas, si bien con planteamientos muy distintos. En “Canoa” vemos a un grupo de muchachos que se refugian en la pequeña localidad poblana de San Miguel Canoa al no poder escalar el volcán La Malinche por las condiciones climatológicas. La paranoica colectiva, guiada por el sacerdote de la iglesia, conduce a los habitantes hasta el linchamiento de los jóvenes.

En contraparte, “Rojo amanecer” retoma los sucesos del dos de octubre de 1968, con una comunidad estudiantil manifestándose contra el gobierno. La magia de “Rojo amanecer” es que está filmada sólo en el apartamento donde se resguarda una familia con dos de sus hijos manifestantes: en la cinta nunca se ve el horror que se vivió en las calles, pues maneja ese suspenso con la narración diferida, los personajes cuentan «lo que vieron».

Otra de las películas recientes y que se ganaron un lugar en el gusto de los espectadores fue “Matando cabos” (2004, dir. Alejandro Lozano), con las actuaciones de Tony Dalton y Kristoff Raczynski. Esta dupla interpreta a dos ejecutivos que deben regresar sano y salvo a su casa a su jefe, luego de que se encuentra escondido en su cajuela. La historia se replicó en el cine español, con el remake de 2013 “¿Quién mató a Bambi?” (dir. Santi Amodeo).

Una cinta reciente dentro de la filmografía mexicana y que encaja en el género del "thriller" es “Visitantes” (2014, dir. Acán Coen), estrenada en diciembre del año pasado. El director plasma una historia donde se entrecruza el "thriller" psicológico con elementos sobrenaturales, con Kate del Castillo y Raúl Méndez en los papeles principales.  

PERFIL

El talento de Aníbal

Aníbal Navarro cursó estudios universitarios vinculados a la administración de empresas, profesionalizándose como actor en el Centro de Educación Artística (CEA) de Televisa. Su formación actoral la complementó con cursos de actuación en la Casa del Teatro en la misma Ciudad de México. En televisión, Aníbal Navarro ha actuado con papeles secundarios en diversas novelas, entre ellas “La fea más bella” (2006), junto con Angélica Vale. Navarro ha tenido roles protagónicos dentro de la longeva serie “Mujer, casos de la vida real”. Su talento frente a las cámaras llegó al séptimo arte con “La hija del caníbal”. Antes de incursionar en la actuación profesional trabajó como modelo, en esa faceta ganó en 1998 el certamen El Modelo México.

PERFIL

Un joven cineasta


Nacido en 1986, Germán Rodríguez Quiñones fundó en 2011 la casa productora Narratario Films, junto con Anet Baca Terán. Desde entonces empezó a trabajar en el proyecto de “Diálogo interno”. Se licenció en comunicación en la FES Acatlán de la Universidad Nacional Autónoma de México. Su experiencia laboral incluye la televisión educativa, dentro de la misma UNAM, además de participar en proyectos de cortometrajes para la Universidad Iberoamericana y en el departamento de publicidad de Ocesa. Su segundo largometraje se encuentra en proceso de preproducción. Para “Diálogo interno” los productores no contaron con apoyos oficiales, ya que todo el presupuesto (50 mil dólares) fue de iniciativa privada.

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