Viernes, 26 de Abril 2024
Entretenimiento | La caricatura que narra la epopeya de los felinos sigue vigente entre chicos y grandes

Los indomables Thundercats

La caricatura que narra la epopeya de los felinos que llegan al Tercer Planeta sigue vigente entre chicos y grandes

Por: EL INFORMADOR

LION-O. Los Thundercats llegaron a la pantalla en 1984. ESPECIAL /

LION-O. Los Thundercats llegaron a la pantalla en 1984. ESPECIAL /

GUADALAJARA, JALISCO (18/FEB/2014).- Perder su planeta, crecer en un medio hostil, luchar contra rivales malvados, superar los temores y prosperar. La fórmula que le dio éxito a Los Thundercats fue y es la misma que ha servido de base para cientos de historias de ficción, aunque en el caso de estos felinos, el excelente diseño de animación, inteligentes guiones y carisma de los protagonistas es lo que les ha permitido perdurar en el gusto del público hasta el día de hoy.

La animación vio la luz en 1984 y presentaba el desesperado escape que tuvieron que realizar los Thundercats, unos felinos humanoides, de su planeta, Thundera. La nave en que viajaban debía encontrar un nuevo lugar donde ellos pudieran vivir, aunque el proceso podría tardar años, si no es que siglos, así que sus ocupantes: Lion-O, Tygra, Panthro, Cheetara, Felino y Felina permanecieron “dormidos” en cápsulas criogénicas, mientras que el patriarca del grupo, Jaga, piloteó la nave hasta su muerte, con tal de llevar sanos y salvos a los últimos sobrevivientes de su raza.

Los felinos llegaron a un lugar llamado Tercer Planeta, donde trataron de reconstruir su vida. El único personaje que creció en el largo camino fue Lion-O, cuya cápsula criogénica estaba mal cerrada, por lo que de ser un niño, ahora posee el cuerpo de un adulto (aunque mentalmente sigue siendo un infante).

El Tercer Planeta demostrará ser todo menos el paraíso prístino que imaginaron los héroes, pues aunque hay seres nobles viviendo en él, también habitan bastantes enemigos, incluyendo Los mutantes (que los siguieron desde Thundera) y Mumm-Ra, una maligna momia que, a lo largo de la serie, se convertirá en un verdadero dolor de cabeza de los protagonistas.

Lecciones de vida


La serie de televisión dio a los Thundercats el “final feliz” que sus fans esperaban en 1990. Pero en 2004 llegó una serie de cómics que le dio continuación a la caricatura y que demostraron que los felinos estaban muy lejos de vivir una vida pacífica.

Un sangriento regreso de Mumm-Ra, la caída en desgracia de Lion-O, nuevos y violentos enemigos del espacio y la restauración de la paz en Nueva Thundera fueron explorados en cinco miniseries, que redondearon la mitología de los personajes y demostraron en pleno nuevo siglo que su popularidad es tan sólida como la Espada del Augurio.

Enredos felinos

Los contenidos infantiles en la década de los ochenta se caracterizaban más por ser decálogos de buen comportamiento que por entretener en sí. Los protagonistas solían dar consejos al final de los episodios para que los niños se portaran bien y las tramas se resumían en el malo siendo vencido por el bueno una y otra vez.

Con los Thundercats surgieron otros elementos. Sin dejar de lado una fuerte carga de valores morales, donde la unión, la comprensión y el esfuerzo eran los principales pilares, la serie también puso sobre la mesa otros temas. La soledad, la discriminación, la violencia e incluso un poco de amor fueron también expuestos en la caricatura, donde muchas veces los Thundercats aprendían la lección mediante una dolorosa derrota.

La serie caló bien entre el público, y se extendió a lo largo de cuatro temporadas. La primera de 65 episodios y las tres restantes con 20 capítulos cada una. La avalancha mediática que le siguió convirtió a los Thundercats en uno de los productos más exitosos de su momento, aunque no sería en la televisión donde los personajes encontrarían su evolución, sino en las viñetas.

SIGUE VIGENTE
Potente maullido

La inquietud de revivir la franquicia de los Thundercats finalmente se concretó en 2011 con el lanzamiento en Estados Unidos de la serie de televisión “Thundercats. Oh!”, nueva versión de la saga donde utilizando una estética muy similar a la animación japonesa, los personajes son puestos al día, respetando algunas cosas de la serie clásica, pero replanteando por completo otras.

El productor Ethan Spaulding declaró para MTV que al actualizar a los personajes “tratamos de mantener algunas cosas básicas para que los reconocieran de inmediato los fans clásicos, como el color de las armaduras y su pelaje. El espíritu de cada uno permanece intacto. Los diseños originales de la década de los ochenta eran grandiosos, pero creo que al actualizarlos han ganado fuerza”.

Sin embargo, y pese al entusiasmo inicial, la serie sobrevivió apenas una temporada, incapaz de superar la sombra de la versión original, que para muchos, seguirá siendo la única.

LO BÁSICO

Espada del Augurio: arma de Leon-O, el único que puede usar este instrumento con cualidades mágicas. En su estado original no es más grande que una daga, pero al grito de “¡Thunder, Thunder, Thundercats, Oh!” aumenta de tamaño.

En su empuñadura tiene el logo de los Thundercats, cuya imagen puede ser proyectada en el cielo como llamado de batalla. También descarga rayos láser.

Piramide de Mumm-Ra: es la base donde reposa el villano de la serie. Posee un foso en el centro cuyas aguas permiten ver a Mumm-Ra lo que sucede en otros lugares. También alberga las estatuas gigantes de los Cuatro Espíritus del Mal, seres con cuyo poder se nutren los deseos de venganza del malvado.

Aunque a primera vista es una mera momia frágil, Mumm-Ra se puede transformar en un musculoso y despiadado oponente al recitar el juramento: “¡Antiguos espíritus del mal, transformen este cuerpo decadente en Mumm-Ra, el inmortal!”.

Snarf: consejero, mandadero y mascota de los Thundercats, es también uno de los últimos de su especie. Fiel compañero de Lion-O, lo ayuda a madurar y a la vez lo mete (a él y a todos los demás) en problemas, aunque eso sí, siempre con buena intención. En la nueva serie pierde su capacidad de hablar.

Los mutantes: villanos recurrentes; sus malvadas intenciones son superadas por la torpeza con que ejecutan sus planes, que terminan en fracasos. Eso sí, Reptilio, Buitro, Chacalo y Mandrilo son persistentes.

Temas

Lee También

Recibe las últimas noticias en tu e-mail

Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día

Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones