CIUDAD DE MÉXICO (11/FEB/2017).- El gobernador del Banco de México (Banxico), Agustín Carstens, declaró ayer que la elevación de tasas de interés que se registró el pasado jueves en 50 puntos base se hizo como medida para mantener una inflación baja y estable.Aunque reconoció que en el país se han tenido choques inflacionarios importantes, los adjudicó a la presión del tipo de cambio, a lo que se sumaron las medidas económicas que anunció el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, además del impacto de la liberación de los precios de las gasolinas.Todo eso —señaló— dio un golpe en la inflación, que se fijó en 4.72%.Explicó que el ajuste a las tasas de interés no tendrá una reacción inmediata en los precios, sino que será a largo plazo, ya que para percibir un pronto efecto, el alza que se necesitaría en las tasas de interés sería muy grande.“El objetivo de esta alza no es neutralizar esos efectos inmediatamente, en un corto plazo, porque verdaderamente el nivel de tasas de interés que se necesitarían serían absurdas, es decir, para muy pocos meses” dijo Carstens en una entrevista radiofónica.Señaló que luego de un lapso de tener tasas de interés bajas, la economía se está moviendo “hacia un escenario de mayores tasas de interés”.El Banxico ajustó el pasado jueves la tasa de referencia en 50 puntos base, con lo cual pasó de 5.75% a 6.25%, el nivel más alto desde abril de 2009.
