América Latina se ajusta tras gozar de una 'década de oro'

BRASILIA, BRASIL (22/SEP/2014).- A pesar de que algunos países siguen en la senda del crecimiento, la llamada “década de oro” en América Latina parece haber llegado a su fin. Bajas calificaciones, declaratorias de default y recesiones son los síntomas que anuncian el final de la fiesta.

Brasil atraviesa una recesión técnica y Venezuela está golpeada por millonarias deudas y una ascendente inflación, mientras Argentina padece una mezcla de estos tres síntomas.

Sin embargo, mientras las previsiones de crecimiento para la región (menos de 2% del PIB para 2014) parecen sombrías después de años registrando topes de 5% y 6%, no todo parece estar perdido. Los países de la Alianza del Pacífico (Chile, Colombia, México y Perú) buscan un crecimiento considerable, de 3% este año y 4% el próximo, según sus proyecciones.

El fin del ‘boom’ del mercado de las materias primas que alimentó el crecimiento de la región, no ha estado seguido de un colapso, dicen los expertos.

“Latinoamérica en esos años (los ochenta y los noventa) era propensa a auges y caídas”, explicó Augusto de la Torre, jefe del Banco Mundial para la región. “En cualquiera de estas situaciones magnificaba los problemas”.

La clave han sido las reformas macroeconómicas que han rescatado a parte de la región de ese ciclo, destacó De la Torre. A estas se suman las políticas en países que capitalizaron el ‘boom’ para acumular reservas internacionales, estimó Juan Ruiz, economista jefe para América del Sur del banco BBVA.

“Hay países que gestionaron bien los buenos tiempos y mantuvieron una sólida gestión macroeconómica. Y hay países que no lo hicieron”.

Uno de los que no es Brasil. Durante el auge, con el estímulo económico de Estados Unidos en los mercados emergentes y una China voraz en la compra de materias primas, la economía de Brasil registró un crecimiento de 4.5% en cinco años hasta 2010, donde alcanzó un pico de 7.5 por ciento. Ahora está en recesión. Agencias

“Inaceptable” desempleo juvenil

Las “inaceptables” cifras de desempleo juvenil alcanzadas en varios países de América Latina exigen una “voluntad política colectiva” para aplicar soluciones a esta lacra, según la directora regional de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para América Latina y Caribe, Elizabeth Tinoco.

Creo que es posible un trabajo decente para los jóvenes, avanzar en la generación de políticas que creen empleos decentes, con calidad, y creo que es posible una voluntad política colectiva que nos permita avanzar en esta dirección”.

Latinoamérica presenta 13.7% de desempleo juvenil, cifra que se eleva a 17% si se refiere sólo a las mujeres jóvenes, números bajos comparados a los niveles europeos (54% en el caso de España; 35% en el de Portugal), pero en cualquier caso “inaceptables”, calificó la también directora general adjunta de OIT.

“No basta con crear empleo, hay que crearlo con garantías, con calidad, y la OIT no descansa en llamar la atención sobre la gravedad de esta situación”.

Tinoco citó a Honduras, cuya “problemática” situación “afecta a la sociedad en conjunto”, porque el desempleo está directamente vinculado “a la creación de estos grupos de violencia juvenil, las maras” y a la migración hacia otros países, como Estados Unidos o México.