BARCELONA, ESPAÑA (27/FEB/2017).- El camino para llegar al arranque de la temporada 2017 de la Fórmula Uno se hace cada vez más corto, luego de que este lunes arrancaran los test de pretemporada en el Circuito de Cataluña, sitio tradicional para que los equipos hagan sus giros de prueba.Para la escudería Force India, la pretemporada arrancó con el tapatío Sergio Pérez al volante del VJM10, el coche con el que este equipo competirá en 2017 buscando hacer un mejor papel que el año anterior, en el que terminó en el cuarto sitio del campeonato de constructores.La jornada a doble sesión resultó ser contrastante para el piloto mexicano, pues de no pasar ningún problema en la sesión matutina, se perdió de la segunda parte del primer día de pruebas por problemas técnicos en el coche."Fue un día con dos caras distintas. La sesión matutina fue muy productiva, fuimos capaces de hacer gran parte de lo que habíamos planeado e intentamos distintas configuraciones y compuestos de neumáticos", compartió Pérez Mendoza al término del primer día de actividades en el trazado catalán.Checo añadió además que no tuvo mayores sobresaltos a lo largo de los 39 giros que dio alrededor del circuito de 4.627 kilómetros de longitud, lo cual le permitió probar por primera vez en pista el VJM10 y conocerlo más a fondo."Desafortunadamente no corrimos en la sesión vespertina por precaución y eso nos costó tiempo en la pista. Esperemos que mañana podamos reponer algo de terreno perdido con Esteban (Ocon) en el coche", continuó el tapatío. "Con un día sólido, podemos completar el resto de nuestra programación y seguir adelante con el plan", concluyó.Sergio Pérez, que arranca su cuarta temporada como piloto de Force India, dio 39 vueltas alrededor del Circuito de Barcelona-Cataluña en la sesión matutina del primer día de pruebas de pretemporada, completando un recorrido de 182 kilómetros.El mejor registro del tapatío fue de 1:23.709 minutos, lo que lo colocó en el séptimo mejor puesto entre los 11 pilotos que vieron acción en la primera jornada en Barcelona.EL INFORMADOR / ALAN RODRÍGUEZ
