Martes, 19 de Marzo 2024
Cultura | La actriz tapatía se fue al DF y allá ha desarrollado con éxito su carrera

Mónica Maci, tiene ocho brazos

La actriz tapatía decidió un día que debía explorar otros horizontes; partió a la capital del país y allá ha desarrollado su carrera en otros rumbos

Por: EL INFORMADOR

Mónica Maci se fue en 2008 al DF a probar suerte como actriz. ESPECIAL /

Mónica Maci se fue en 2008 al DF a probar suerte como actriz. ESPECIAL /

GUADALAJARA, JALISCO (28/JUL/2014).- Mónica Maci lo tenía todo y decidió dejarlo. Como actriz de teatro siempre destacó en la cartelera independiente de Guadalajara. Pero no era suficiente. Mónica dio el brinco de la noche a la mañana. Hizo maletas y se despidió del aplauso local que la respaldaba.

En 2008 se fue la Ciudad de México a probar suerte. A empezar de cero. Lo logró y actualmente es un pulpo que no se da abasto con la cantidad de proyectos que la llaman para integrarla a producciones de teatro, cine y televisión.

Mónica dice que en Guadalajara nunca le hizo falta nada, pero existió una inquietud por saber qué hay más allá de los escenarios locales. La joven de 28 años de edad no dudó en seguir su instinto como devoradora de aprendizaje. Al mes de llegar al Distrito Federal fue acreedora de la beca del Centro de Estudios para la Voz (Ceuvoz), impulsada por el Instituto Nacional de Bellas Artes y la Secretaría de Cultura de Jalisco.

Ahí Mónica entendió que la competencia que estaba por enfrentar no sería sencilla. Confiada del potencial que aguardaba aún escondido en su talento, la tapatía optó por exhibir su don interpretativo en las diferentes “castineras” de su nueva ciudad.

La romántica idea de pensar que quizá alguno de esos castings le devolvería la llamada fue el motor que la animó a quedarse, por tiempo indefinido, en Ciudad de México, después de concluir los seis meses de su temporal beca.

“Quería un cambio en mi vida, seguir estudiando y eso ya lo había hecho en Guadalajara en el CEDART José Clemente Orozco. También deseaba conocer más gente, trabajar con otras personas porque siempre he pensado que eso me retroalimenta, aporta a mi carrera y en la forma de desenvolverme”.

La selva del tiempo

Tras su llegada al Distrito Federal, los proyectos con Mónica comenzaron a subir. La participación en cortometrajes emergentes llegó de la mano de “Payasos” del venezolano Jorge Hernández Aldana y “El parto” del coahuilense Rafael Elizalde. El doblaje de voz también tuvo su oportunidad con el largometraje animado “El juego de los campeones”, en el que interpretó al personaje protagónico “Lily”. Pese a que las ofertas comenzaron a brillar, Maci reconoce que el aprendizaje profesional no solo le llegó de los foros de grabación; también asimiló cómo trabajar en videos musicales tras su participación en los clips de Hello Seahorse!. También se formó como actriz de telenovelas, pues ha trabajado en producciones de Tv Azteca, “Pobre Diabla” y “La loba”. Ahora es reto es sobrevivir y hacer valer su talento en la cuestión económica. “El día a día en el Distrito Federal te hace pensar de distintas formas como actor y no solo en lo creativo; sino también en lo económico. En cierta forma te vuelves un propio manager de ti mismo. Te haces más disciplinada”.

Con la mano en la cintura

Aunque el teatro ha quedado un poco rezagado en los últimos años, la actriz destaca que es en esta plataforma en donde ha encontrado a uno de sus personajes predilectos, y como base a seguir nutriendo su interpretación en futuros proyectos.

El personaje de “Elisa” que encarnó en la puesta “París detrás de la puerta”, bajo la dirección de Fernando Sakannasi, y que formó parte del festival universitario de la Universidad Nacional Autónoma México, en 2011, no solo le permitió integrarse a la comunidad teatral capitalina, sino que le permitió mantener un vínculo con Guadalajara, pues con esta producción logró realizar una temporada en La Casa Suspendida.

Mónica comenzó a definir su gusto por la elección de personajes donde el carácter sea la esencia primordial de su capacidad interpretativa, como lo hizo en “Las chicas del 3.5 floppies” y “Esperando a Godot”, trabajos que le significaron reconocimientos como mejor actriz principal en el Festival de Teatro Universitario 2006 y 2007, respectivamente.

“A los actores nos apasionan los personajes de carácter; son los que mayor enseñanza dan en lo referente de la interpretación y de la vida”.

Mónica confiesa que actualmente vive una de las etapas más productivas y consolidadas de su trayectoria actoral, pues dos grandes proyectos están por brindarle mayor proyección nacional. Uno de ellos será con el estreno del filme de comedia “Ángeles de acero”, del director Gustavo Moreno, donde actúan personalidades como Damián Alcázar, Dolores Heredia y Arturo Ríos. El segundo es el lanzamiento de “Los Vigilantes”, dirigida por el tapatío Rodrigo Márquez, serie en la que Mónica Maci se adentrará a un discurso donde la política y la religión son los argumentos centrales de la trama.

Guadalajara siempre en la mente

Aunque regresar a vivir a la capital tapatía ya no es una opción en Mónica Maci, la actriz no descarta la posibilidad de retornar a Guadalajara si la oferta de trabajo es atractiva, pues considera que actualmente en el aspecto actoral la Ciudad de México cada vez se descentraliza más de los grandes y novedosos proyectos.

Al hablar de Guadalajara, Maci no evita el recordar a colegas que fungieron como base formadora en su pasión por la actuación. Inmediatamente menciona a la actriz, productora y directora teatral Sara Isabel Quintero Coronado; al director, actor y dramaturgo Daniel Constantini, así como a la directora del CEDART, Alicia Yapur.

“Me encantaría regresar a trabajar. Hay mucha gente talentosa en cine y teatro y no solamente en Guadalajara, me gustaría trabajar en otras partes. Como actor siempre tienes esas ganas de querer trabajar más allá de donde te formaste o vives”.

TOMA NOTA
Los más

Difícil:
“El dejar todo. Tanto mi familia, amigos y el novio que tenía en Guadalajara en aquel momento”.

Fácil: “Adaptarme de un lugar a otro, al clima, a la gente, al lugar. Eso ha sido lo más fácil”.

Disgusta: “En la Ciudad de México la vida es muy rápida por las distancias, a eso se suma el tráfico. Hay que hacer yoga o meditación para no perder la cabeza”.

Gusta: “Todo. La satisfacción de mi trabajo, de lo que estoy logrando”.

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