''Miguel Hidalgo en Colima'' muestra documentos testimoniales

CIUDAD DE MÉXICO (20/DIC/2010).- Un importante episodio de la vida de don Miguel Hidalgo y Costilla ha sido rescatado a través de las actas de matrimonio y bautismo que suscribió durante su estadía en la Villa de Colima, en el año de 1792.  

Entre otras cuestiones presenta el libro Miguel Hidalgo en Colima, recopilado por el historiador Juan Carlos Reyes.  

Este libro fue editado por la Secretaría de Cultura de Colima y el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), por medio de Fondos del Bicentenario.  

El volumen contiene, entre otros tantos documentos, las actas de matrimonio y de bautismo que fueron firmadas de puño y letra por el Padre de la Patria, encontrados en el Templo El Beaterio.  

Los documentos reunidos son precisamente de cuando dejó la rectoría del Colegio de San Nicolás, en Valladolid (hoy Morelia), aseguró el historiador Reyes, quien se dio a la tarea de palografiar e investigar los documentos que se hallan en el Archivo parroquial de Colima.  

Reyes, quien es especialista en la historia de Colima y también del cultivo y comercio de la sal en México, señaló que aunque los documentos parroquiales no contienen información del pensamiento del caudillo de la Independencia, "sí arrojan información valiosa sobre el comportamiento de la población de la Villa de Colima en ese año.  

'Sobre todo de la migración y de las uniones matrimoniales de sus habitantes', precisó.  

Destacó que además de las actas matrimoniales y tres documentos bautismales, el Padre de la Patria fungió como testigo en la compraventa de una hacienda, cuyo original se encuentra en el Archivo Histórico del Estado, y que ahora también es accesible para el público no especializado, gracias al libro Miguel Hidalgo en Colima.  

El historiador comentó que poco se sabe de la vida del cura Hidalgo en Colima, pero que sí es seguro que tenía amistad con un señor de apellido Gamba, que fue nombrado Intendente de la Villa de Colima, por las mismas fechas. Pero no existe ningún documento que aporte más datos sobre esta relación.  

Señaló que las "consejas populares y leyendas locales" han difundido la especie de que la hija de la esposa del Intendente Gamba, era en realidad hija de Hidalgo, la cual fue conocida como "La Fernandita", porque Hidalgo siempre la protegió y en el ejército Insurgente se le llegó a conocer como "La Capitana".  

Pero el historiador hizo hincapié en que "no contamos con un solo documento que pruebe o desmienta estos rumores".  
Tampoco, afirmó Reyes, es seguro que fuera un "castigo" o un "premio" el haberlo enviado a Colima.  

Lo que sí es seguro es que Gamba e Hidalgo se conocieron en Valladolid y que llegaron casi en las mismas fechas a la Villa de Colima, lo que hace probable que el propio Gamba lo haya invitado a venir.  

También abandonan la Villa por las mismas fechas, Hidalgo se va para San Francisco Torres Mochas, Guanajuato, y Gamba viaja con su familia a Guadalajara.  

El maestro Reyes destacó que en los documentos palografiados y estudiados, de los cuales siempre se supo de su existencia, encontró "la presencia del pueblo de Colima, porque son como un retrato que muestra el breve lapso de siete meses que estuvo el padre Miguel Hidalgo en tierras colimenses.  

Fue a partir de febrero de 1792, cuando el obispo de Michoacán, Fray Antonio de San Miguel, nombró al bachiller Miguel Hidalgo, cura de la Villa de Colima, a la edad de 39 años.  

El especialista indicó que en el volumen se da a conocer información de los registros autógrafos en los libros manuscritos del Archivo Parroquial de la Villa de Colima, en el templo de San Felipe de Jesús, mejor conocido como El Beaterio, en los que se encuentran actas de matrimonio y bautismo de esa época.  

Entre otros documentos interesantes "que se muestran en este texto figuran, una gran cantidad de información sobre quienes eran las personas de Colima, de dónde venían, quienes eran los que se casaban y con quién, cuál era su nivel social, parientes de quién, entre otros datos importantes para la sociedad".  

 El autor de "La sal en México", dos tomos editados por la Dirección de Publicaciones del Conaculta, concluyó que el estudio de este patrimonio, documentos de época propios de la labor sacerdotal del párroco es muy importante para la historia de México porque retrata un pasaje importante en la vida de uno de los héroes de la Independencia.