Miércoles, 24 de Abril 2024
Cultura | Sus virtudes fueron destacadas por el muralista Diego Rivera

Héctor García, un trotamundos creador de su propia leyenda

El fotoperiodista, reconocido a nivel nacional e internacional, cumple 87 años de vida este próximo lunes

Por: NTX

CIUDAD DE MÉXICO (22/AGO/2010).- El fotoperiodista escribe con imágenes, busca la verdad y sus herramientas le permiten ser los ojos del mundo en todos los acontecimientos, asegura Héctor García, quien este lunes festejará 87 años de vida y más de 60 como artista de la lente.  

Nacido el 23 de agosto e 1923, en la Ciudad de México, García es reconocido como uno de los fotoperiodistas más importantes a nivel nacional e internacional.  

El muralista Diego Rivera habló en alguna ocasión del excelente artista que es y entre sus virtudes destacó la capacidad que tiene de expresar con emoción, belleza, plenitud de forma y profunda sensibilidad y comprensión humanas, la vida que lo rodea.  

'Desde el accidente de calle hasta la plástica sublimada de la danza, pasando por todos los matices de las acciones del ser humano sobre la tierra, sus reacciones ante todos los hechos, mediante sus propias emociones', afirmó el afamado artista.  

Y es que a lo largo de estas casi siete décadas de ejercicio profesional, García ha sido lo mismo reportero gráfico que llevó imágenes a los diarios vespertinos, que a los muros de la galería; un fotógrafo trotacalles y trotamundos; conversador colmado de anécdotas y constructor de su propia leyenda, dueño de un archivo todavía por explotar.  

Lo mismo ha sido amigo de las bailarinas exóticas que de artistas de renombre e intelectuales de izquierda; el cronista de la semana ardiente de 1958, del verano rebelde de 1968 y de la campaña electoral de Luis Echeverría, que a la distancia le han valido el sobre nombre del "fotógrafo de la calle".  

Quien ha visto a Héctor García lo recuerda con su cámara en mano, con ojos que parecen escudriñar el fondo de aquello que atrapa su mirada, con un gesto amigable del que se desprende una sonrisa tan grande que hace que sus interlocutores sonrían con él, y con unas manos tan grandes que en ellas atrapa las c cámaras que manipula como un maestro.  

Nacido en la Ciudad de México el 23 de agosto de 1923, el decano de la fotografía estudió en el Instituto de Artes y Ciencias Cinematográficas, donde fue discípulo de Manuel Alvarez Bravo y Gabriel Figueroa.  

Desde 1945 trabaja como periodista gráfico para diversas publicaciones de México y el extranjero.  

Desempeñó tareas docentes en el Centro Universitario de Estudios Cinematográficos (CUEC) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y participó en revistas como Mañana, Siempre!, Paris Macht, Revista América, Time, Life, O'Cruceiro y Cine Mundial.  

"El fotoperiodismo es la carrera más peligrosa a la que se puede dedicar un hombre", dijo alguna vez el maestro, al recordar a su colega Robert Capa, reportero de la revista 'Life', quien falleció cuando pisó una mina en la guerra de Corea.  

A decir del artista de la lente, "el fotoperiodista se enfrenta a situaciones donde nada está dicho hasta que los hechos no lo confrontan, y en medio de esa situación incierta, tiene que hacer su trabajo y correr el riesgo que enfrentan los que están involucrados en un hecho, para bien o para mal".  

El protagonista del libro "México sin retoque", que publicó la UNAM en 1987, asegura que gracias a la fotografía "todos somos fotógrafos y creadores. La fotografía sirve para todo, para nacer y morir, siempre nos acompaña. Este es un compromiso muy grande que debemos cumplir".  

Sostiene que "el artista es un creador pero no puede prescindir de la ética, de la responsabilidad que impone al fotoperiodista una obligación sobre todas las demás: buscar la verdad".  

Hablar el idioma que es la fotografía, escribir con imágenes, es precisamente lo que emparenta su arte con ese espíritu platínico de la luz interior, "tales son las herramientas del fotoperiodista, las que junto con su credencial, le permiten ser los ojos del mundo en todos los acontecimientos", comenta el experimentado fotógrafo.  

Protagonista de más de 65 exposiciones individuales en México y el extranjero, la obra de Héctor García está en importantes colecciones públicas y privadas, entre las que destacan las del Museo Nacional de Antropología; Museo de la Fotografía, México; Bibliotheque Nationale, París/Francia; The Library of Congress, Washington, Estados Unidos, y Los Museos Vaticanos.  

Atesora desnudos, campesinos, mujeres, artistas, braceros, mineros, niños de la calle, presos, gestos, escenas cotidianas y todas aquellas que sus ojos escrudriñan a través de las cuales preserva una buena dosis de la esencia de la vida.  

Asimismo, ha ilustrado libros como "Mexique, Editions du Seuil" (París 1964), "Nueva Grandeza Mexicana", de Salvador Novo (México 1967); "Los Indios de México", de Fernando Benítez (México 1970), entre otros.  

Héctor García carga en su hombros no sólo las cámaras sino numerosos reconocimientos, como el Premio Nacional de Artes y Ciencias 2002 y el Premio Nacional de Periodismo en 1958, 1969, 1979.  

Dueño de imágenes de André Breton, Luis Buñuel, Jeanne Moreau, Malraux, David Alfaro Siqueiros, Frida Kahlo y Pablo Picasso, entre otros, el fotógrafo de la calle tiene una galería y una fundación que lleva su nombre y que se dedican a promover actividades culturales, entre ellas una muestra homenaje al recién fallecido Carlos Monsiváis (1938-2010).  

Temas

Lee También

Recibe las últimas noticias en tu e-mail

Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día

Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones